Vendimia rebelde…

Mendoza….tierra del sol y del buen vino…. Mendoza la de los Andes infinitos…., estas frases son parte del estribillo de lo que se conoce como la “marcha de la vendimia”, que en realidad se llama “Canto a Mendoza” y hoy por hoy y hasta mediados de Marzo, para algunos de los mendocinos se convierte en una tortura auditiva casi insoportable (se trata de una marcha al mejor estilo militar consecuente con sus orígenes por 1936 e institucionalizada en 1946) y para otros (quizás muchísimos más) un “entonador” que alegra y revive nostalgias de años mejores ya pasados.

Así se empieza a vivir “Vendimia” en Mendoza, y para esta fecha y desde hace mucho empieza a ser el termómetro de lo que vendrá en el año. Para esta fiesta se pretende mostrarle al país y el mundo que Mendoza es una provincia ordenada, limpia y con proyectos “sustentables” para el que quiera visitarla como turista o como inversor que quiera dejar sus capitales (¿¿??) y la madre en coche.

El tema es que por estos días “los artistas” que participan en esta fiestita (alrededor de 1000 trabajadores entre bailarines, utileros, músicos, coreógrafos, etc.) se le plantaron al gobierno y les exigen que se les reconozca un salario acorde con la categoría que se le da al evento, ellos reclaman $4.120 rigiéndose por el convenio de actores.

Por su puesto el gobierno dijo no hay plata y no se puede pagar esa barbaridad. Los artistas como nunca antes, autoconvocados decidieron el paro, si señor, nadie lo puede creer, los artistas de “La Fiesta” de paro y el “Negro” Blanco (Secretario del Sindicato de Actores de la provincia) no tuvo más alternativa que ponerse al frente del reclamo o le pasaban por encima la aplanadora de la democracia directa de la autoconvocatoria y hasta que el gobierno no se acercara en algo a sus pretensiones, no se volvía a los ensayos.

Ayer, después de cinco días de paro, en asamblea donde participaron más de 700 de ellos, terminaron aceptando $3.500 que fue hasta donde llegó la última oferta gubernamental, y la firma de los contratos antes de seguir con los ensayos, y la fecha precisa de pago además, como así también el de seguir discutiendo alternativas de continuidad laboral para el resto del año.

Este conflicto es una muestra de lo que se viene en el ámbito de los trabajadores del Estado de esta provincia, reclamos y necesidades hay en todo el arco: magisterio, salud, judiciales, municipales, y el gobierno ha sido claro, “no hay plata” y lo previsto en el presupuesto no supera el 10%, cuando la mayoría de los reclamos rondan entre el 35 y 50%.

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