No podrán frenar el odio acumulado

Lo que hay es cada día mayor explotación y salarios de miseria

El miércoles pasado fue el almuerzo con los empresarios. Allí el gobierno les garantizó a los popes de los monopolios el resguardo y crecimiento de los negocios que a toda máquina se están realizando.

El próximo martes será el turno de los sindicalistas. Allí se les pedirá a Moyano y Cía. que mantengan dentro de lo “razonable” la ronda paritaria que se avecina. A cambio, se les liberará un fondo de 4.000 millones de pesos que se encuentran en una cuenta del Banco Nación, correspondiente al Fondo Solidario de Redistribución.

El círculo cierra perfecto. La principal preocupación del gobierno de los monopolios es que los trabajadores no les jodamos la fiesta con reclamos y demandas: Nos dicen en la cara: “Todo marcha viento en popa, pero Ustedes confórmense con lo que hay”. Y lo que hay es cada día mayor explotación y salarios de miseria.

El gobierno, los monopolios y los gerentes sindicales llevan adelante una verdadera cruzada contra la clase obrera y los asalariados en general. Una cruzada contra lo que ellos saben es lo único que puede aguarles la fiesta. Que el proletariado argentino, como en otras etapas de nuestra historia política, irrumpa de lleno en la lucha política nacional, yendo por lo propio y además por la cabeza de los gobernantes y todos sus sirvientes.

No se equivocan en los más mínimo. En lo único que le erran es en querer creer que las componendas por arriba van a apagar el fuego que crece por abajo. En pensar que trabajadores de empresas monopolistas que están produciendo a destajo y que ganan menos de 6 pesos la hora, se resignen a esa indignidad y bajen mansos la cabeza, porque lo dice la CGT y el gobierno. En pensar que con el lumpenaje sindical de las barras bravas, podrán frenar el odio acumulado por años y años de sometimiento y destrato. Harían bien los gremialistas en informarle a la Presidente que ya hay importante cantidad de lugares de trabajo donde los laburantes no están esperando las paritarias, sino que ya están reclamando le guste a quien le guste; y que el reclamo del 40% de aumento se está haciendo fuerte en varios lugares de trabajo.

Y que en ese camino de luchas se sigue fraguando la experiencia autoconvocada que, en los hechos, comienza a barrer con el corsé del sindicalismo traidor para construir las organizaciones reivindicativas y políticas de la clase obrera. Y que allí está surgiendo la verdadera oposición revolucionaria que todo el pueblo argentino está esperando.

Están sentados sobre un volcán, la montaña deja sentir las primeras erupciones y ellos quieren seguir pensando que están en una playa del Caribe.

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