Ferrocariles: buscan culpar a los trabajadores

La situación del transporte del ferrocarril, luego de los accidentes mortales que han sucedido durante estos últimos tiempos, lejos de mejorar, ha empeorado enormemente. Y como ya hemos denunciado en notas anteriores, tales accidentes, no sólo han intentado ocultarlos sino que los han distorsionado a través de los medios masivos de comunicación, para que la empresa y el gobierno no paguen el costo político que esto significa.

Tanto en el que causó 51 muertes en Once, como en el último, donde otro choque de trenes dejó 3 muertos y más de 60 heridos, en ambos, la burguesía y su gobierno apuntaron a culpar a los trabajadores, específicamente a los motorman, de manera totalmente injustificada.

Para llevar adelante este plan, han tomado medidas dentro de la empresa que apuntan a una persecución indiscriminada a los trabajadores. No sólo están poniendo cámaras dentro de las cabinas de control de los trenes, si no que envían a todos los trabajadores a hacerse análisis de sangre para ver si tienen adicciones. Luego los mandan a hacer un curso, pero solamente si tienen el alta médica. Estas medidas que toma la empresa se llevan a cabo con el único objetivo de apuntar la pura y exclusiva responsabilidad a los trabajadores ante cualquier problema, intentando ocultar el verdadero estado deplorable en el que se encuentran los diferentes servicios de trenes, y ocultando también el despilfarro que el gobierno hace en subsidios a los empresarios, para que toda esa masa de dinero solamente acreciente los bolsillos de unas pocas empresas.

En este marco, transcribimos una entrevista a un compañero de la línea Roca, desafectado del servicio por tales motivos:

-¿Cuál es tu situación actual con el trabajo?

-Hoy, como otros compañeros, estoy fuera de servicio, porque la empresa UGOFE, por orden del Ministerio de Transporte, desde hace 3 meses está realizando a sus trabajadores en los análisis psicofísicos anuales un doping, y a aquellos compañeros que resulten positivos son desafectados de su servicio.

– ¿Qué postura toma la empresa UGOFE ante los casos positivos?

– En primer lugar nos notifican que vamos a ser separados de servicio, después nos hacen firmar un papel, una constancia de que nos separan de servicio por ser “adictos” y nos mandan a rehabilitar por nuestra propia cuenta, lavándose las manos.

– La Fraternidad abre cursos para que se reciban de conductores… en este caso ¿Qué pasa con los trabajadores que están realizando ese curso y resultan positivos del doping?

– La empresa UGOFE se encarga controlar que no asistamos al curso hasta que presentemos el alta médica por escrito, de manera particular, porque tenemos que rehabilitarnos por nuestros medios, pagando consultas a psicólogos particulares por ejemplo.

– ¿Qué sentís vos y tus compañeros ante esta situación?

– Sentimos que somos discriminados, que están invadiendo nuestra privacidad y que ni la empresa ni el sindicato o los delegados nos apoyan ni representan. Nos da mucha impotencia porque nuestra vida es ventilada con liviandad, no respetan la confidencialidad con la que se debería tratar este problema. Hay muchos compañeros que tienen miedo de hablar por las persecuciones, y la situación se está poniendo muy tensa en el ferrocarril.

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