En la provincia de Santa Fe, todos los empleados estatales están de paro.
La huelga es por 48 horas y comprende a todos los docentes públicos, a los empleados de todas las municipalidades y comunas, a todos los empleados estatales de la provincia y a todos los trabajadores de la salud pública provincial (empleados, médicos, enfermeros). A ellos se han sumado los docentes particulares y los profesores universitarios.
El conflicto se desató cuando el gobierno provincial ofreció a los docentes un aumento de 7% ¿?
A los empleados municipales les ofrecieron en la ciudad de Rosario un aumento de 15%.
El gremio de docentes reclama un 25% y el municipal pretende aumentos del 20%, aunque entre los trabajadores de ambos sectores los reclamos superan holgadamente ese incremento.
Ayer se realizó una marcha masiva que congregó a docentes estatales y privados reclamando la mejora salarial y otros incrementos presupuestarios.
En el horno de la lucha de clases se recalienta la temperatura y los gobiernos municipales y provinciales sufren el mismo acoso que el gobierno nacional.
Nadie escapa a la crisis política y el pueblo no hace diferencia de banderas políticas o signos partidarios con los que aparecen los funcionarios. Se trata de dar pelea por una vida digna y ante ello no hay disfraz que valga. Los gobernantes desnudan el interés que defienden, que es el dinero que los monopolios reclaman para sus negocios y se enfrentan contra quienes dicen defender: los trabajadores y el pueblo.
Los márgenes se les achican y la crisis política se agranda haciendo crujir todo el sistema.