Conocimos hoy la cuarta resolución de un juez federal para desalojar el puente Gral. San Martín, cortado desde hace seis años. ¿Y las tres anteriores? Se olvidaron de aplicarlas o ¿es que no pudieron?
Sin embargo, los voceros del gobierno salieron rápido a garantizar que, esta vez sí, se cumplirá la orden del juez. Compromisos contraídos con el gobierno uruguayo (y por ende, con la multinacional Botnia) así lo exigen. Los progresistas aceptan sin chistar a la hora de la sumisión a las trasnacionales. ¿O acaso en Andalgalá no pasó lo mismo, reprimiendo a los pobladores que resisten a la multinacional Barrick?
Pero no se trata de criticar lo que hacen quienes no saben ni quieren hacer otra cosa que ir en contra de los verdaderos intereses populares. Tal como lo dijo una pobladora en el corte: “El derecho a la vida es supremo y está sobre el derecho al libre tránsito”. Nada más ni nada menos. Contundente. Como lo dijo José Martí: “Grande es la palabra cuando cabalga la razón”.
Se trata de resaltar con mayúsculas la decisión, la dignidad y la honra de la Asamblea de Gualeguaychú y de todo el pueblo.
Por lo hecho en estos seis años y por lo que viene. Allí se resume el enfrentamiento contra todos los poderes y las instituciones que la burguesía monopolista posee, pero que son absolutamente impotentes a la hora de determinarse de qué lado está la razón y, en consecuencia, la fortaleza y la fuerza políticas. Trasnacionales, tribunales internacionales y Estados a su servicio son enfrentadas con el poder del pueblo autoconvocado.
Hoy Gualeguaychú resume todo eso, como así lo hacen miles y miles de luchas de nuestro pueblo a lo largo y ancho del país, y que no son tan conocidas.
¡NO A LAS PAPELERAS, SI A LA VIDA!
¡FUERA BOTNIA!
¡Todos con Gualeguaychú!