Durante la semana pasada, un grupo de indígenas intentó cortar la Ruta Nac. 11 cerca de la ciudad de Clorinda en reclamos de viviendas que el gobierno había prometido y que no le cumplieron.
Gendarmería y policía se movilizaron para evitar el corte amenazando con reprimir.
La situación se mantiene muy tensa porque los indígenas no ceden en su justo intento y aprovechan para denunciar públicamente a los punteros y funcionarios del gobierno que fueron beneficiados con las viviendas.
Por otro lado, docentes, organizaciones sociales y empleados públicos acordaron una marcha para el 21 de setiembre con la consigna «paz, pan, trabajo y justicia para todos”. En un barrio, los vecinos se autoconvocaron para reclamar la construcción de una escuela que el gobierno también había prometido y no cumplió.