Mientras todos nosotros, los trabajadores y el pueblo, nos desvelamos viendo cómo hacer para tratar de pasar este fin de año de la mejor manera posible junto a familiares y amigos, en el día de ayer un festivo grupo de representantes burgueses se reunían para pergeñar los pasos a seguir frente al notable crecimiento del descontento, bronca, luchas y movilizaciones de los sectores populares. En la sede de la CGT y sentados a una misma mesa aparecieron para la foto Hugo Moyano, Omar Viviani (taxistas), Andrés Rodríguez (UPCN), José Luis Lingieri (ex – OSN) y Antonio Caló (metalúrgicos), junto a los representantes de la UIA, Méndez y De Mendiguren.
«La inflación es una preocupación que tenemos todos porque se corre el peligro de una escalada de precios”, dicen con total impunidad, como si todos ellos no tuviesen nada que ver con los pesares que padecemos. Y cuando hablan de que “tiene que haber un verdadero sacrificio de todos los sectores» ya sabemos a qué se refieren: el único sacrificio lo hacemos nosotros, los que ponemos el lomo todos los días de sol a sol trabajando y generando las ganancias que ellos se apropian.
Más allá de las declaraciones “políticamente correctas”, el principal objetivo y en el que tienen una «absoluta coincidencia», es“ alcanzar un acuerdo social que permita contribuir al crecimiento y desarrollo de la economía y a la distribución de la riqueza»; lo que en criollo quiere decir: pongamos YA un techo para los aumentos salariales porque se nos está yendo todo a la m…
Si bien dijeron que no hablaron sobre porcentajes, todos sabemos que esa es la principal preocupación de todos ellos, porque el horno no está para bollos y los acuerdos que a las apuradas vienen intentando en algunas ramas, se les están cayendo a pedazos por la decidida lucha de los trabajadores.
De hecho, poco antes del encuentro, Méndez había dicho que “no le parecía adecuado» el reclamo por un plus salarial antes fin de año, demanda que más allá del año que viene, está rebotando por todos lados. Respecto a los aumentos salariales, también dijo que “si la cifra empezara con un número 3 esto sería un descontrol”… ocurre que la mayoría de los reclamos de aumentos salariales superan el 30% y no olvidemos que “el numerito mágico” que dejaron trascender desde el gobierno es del 18%.
Lo que ambas partes expresan con todo esto es la necesidad política que la tercera pata de esta Santa Alianza contra los trabajadores y el pueblo (que es el Gobierno) juegue su papel y marque lo antes posible la cancha del Consejo Económico y Social, buscando ese poco de paz que la clase burguesa NO tuvo durante 2010, y que tampoco tendrá durante 2011.
Ningún techo para la discusión salarial. Ningún pacto social ni acuerdo de clases.
La lucha de los trabajadores los desarma, a la vez que nos fortalece como proletariado y como pueblo.