- «Estamos trabajando con la policía, los servicios de inteligencia -MI5- y la industria para ver si estaría bien frenar a la gente que usa estas webs y servicios para comunicarse cuando sabemos que están incitando a la violencia, el desorden y la criminalidad«.
- «El contraataque ha comenzado de verdad. En cuanto a la minoría descontrolada, los criminales que se llevaron lo que pudieron, les digo: vamos a perseguirlos, vamos a encontrarlos, vamos a acusarlos, vamos a castigarlos. Van a pagar por lo que hicieron«.
- «Todo el país está conmocionado por las escenas espantosas de gente saqueando, de violencia, vandalismo y robos. Es criminalidad pura y dura. Y no hay ninguna excusa para ello«.
- «La responsabilidad del Gobierno es garantizar que se contemple cualquier contingencia en el futuro, incluyendo tareas que el Ejército podría asumir para liberar más policías para la primera línea«.
Hay que recordar que David Cameron implementó el mayor ajuste contra el pueblo luego de la Segunda Guerra Mundial. A menos de un año de ello eliminó 500.000 puestos de trabajo, disminuyó las matrículas de 3.000 a 1.000 libras anuales, recortó beneficios para obtener ”viviendas sociales”, subió la edad jubilatoria a los 66 años, cerró clubes barriales, etc.
Las revueltas están expresando la problemática social en todo el Reino Unido. Mienten cuando dicen que los saqueos están provocados por pandillas. La falta de oportunidades para cientos de miles de jóvenes trasciende cualquier tipo de adjetivación a esta explosión social. Lo cierto es que se acabaron los tiempos de la Tacher y su capitalismo ofensivo. El sistema es esto, no otra cosa y el señor David Cameron entendiendo el contexto político comienza a dar signos de retroceder con los ajustes hace pocos meses ejecutados.
Las cuatro bravuconadas solo están escondiendo la profunda debilidad política que los envuelve y la intención de aliviar el contexto en que deberán presentar retirada.