(Nota publicada por nuestro Partido en el Facebook del norte santafesino)
Como se viene mostrando a lo largo y ancho del país, la situación política de la burguesía es cada vez más crítica, fundamentalmente lapidaria cuando el timón es conducido por la clase obrera y el pueblo.
Esta semana y la que pasó en el norte santafesino, para los burgueses, algo huele mal. El estado de ánimo de bronca del pueblo es creciente y se está transformando cada vez más en contundencia organizada. A pasos del «rato democrático» de octubre el gobierno de los monopolios no puede hacer pie en ningún frente. En lo provincial se sumergen asquerosamente en una actitud abierta y rastrera, frente al mandato de los monopolios, quienes quieren llegar lo más silenciosamente a la «primavera» de octubre, primavera precoz. Porque saben bien que en cada acto eleccionario se hunden más y más en su propio fango.
El gobernador Binner al frente de las cuestiones burocráticas de la burguesía, intenta presentarse como lo nuevo y con dos vueltas de roscas más que el progresismo cínico que tenemos en el resto del país. Todos hediondos de revolcarse en sus propias mierdas.
La clase obrera y el pueblo dan grandes pasos en cada revolcada que ellos se dan. Sin ir más lejos mañana 20 de septiembre, pasado 21, el miércoles y jueves de la semana que transcurrimos, los docentes de la provincia (nucleados en el gremio AMSAFE) en asamblea general decretaron el paro por la reducción de la edad jubilatoria, acorralando al gobierno provincial. Muchos funcionarios especulan con que si el gremio responde al gobierno nacional o a Kadafi, lo cierto es que a estas alturas no engañan a nadie, el gremio se planta como un negociador (¿qué negocian..? ¿la dignidad de los docentes?) y el gobierno como el gran reparador.
Las cosas por su nombre: SI EL GREMIO VA AL PARO ES PORQUE LA PRESIÓN DE LAS BASES DOCENTES ES INBANCABLE, NO LA PUEDEN DETENER NI CON INTENTOS DE NEGOCIACIONES TURBIAS NI CON PROMESAS VANAS.
Por otro lado, en el plano reconquistense, sigue latente el conflicto textil, con una noticia bomba que no la dan a conocer ni por cartas secretas, que es el supuesto traspaso de las textiles del monopolio Vicentín hacia otra firma importante. Mal herido por el conflicto, el grupo Vicentín tira la esponja, ya que la bronca creciente que se vive adentro de la fábrica es terrible y aparentemente no están dispuestos a volver a recibir otro garrote en el corto plazo. Si a esto le sumamos el conflicto de la textil Manufactura Algodonera Reconquista, donde el conjunto de los obreros vienen dispuestos al enfrentamiento abierto contra la patronal, ya que se han realizado denuncias en los organismos del Estado por la situación de los contratados y las condiciones de trabajo y de higiene y seguridad industrial dentro de la planta, pasando por alto la burocracia sindical. Este conflicto les significa mucho tanto al gobierno como a la burguesía local, es la punta del ovillo para desatar la unidad del pueblo textil. El estado asambleario en esta fábrica es constante y las decisiones son firmes sin dar espacio a negociaciones a espaldas de los trabajadores. La única salida para la patronal- representada por su dueño José Luis Trigueiro- que se encuentra acorralada y nerviosa, es que deberá respetar y cumplir las demandas de los obreros que luchan por el blanqueo total de los compañeros y el cumplimiento del convenio colectivo textil de la rama del algodón.