En las apuradas sesiones en el Congreso, el gobierno de los monopolios busca abrochar los principales mecanismos “legales” e “institucionales” del ajuste que la burguesía monopolista necesita para continuar garantizando sus ganancias. Entre ellos el “gasto” previsto para 2012 que continúa otorgando subsidios a las grandes empresas, entre las más relevantes, a las de Energía, Combustibles, Minería y Transporte; o la modificación del código penal con lo que intentan poner bajo amenaza a la movilización y la lucha social.
Pero hay otras cuestiones que allí no se discuten, justamente, las que golpean directamente la economía familiar de millones de trabajadores. Entre muchas otras, tal es el caso del impuesto a las ganancias a los salarios e ingresos de jubilados y pensionados.
Datos conocidos en el día de ayer revelan que cada vez son más los trabajadores que sufren descuentos en sus salarios por el pago del impuesto a las Ganancias, debido al proceso inflacionario.
Quiere decir que, además de pagar más caro el costo de la vida, cada vez son más los trabajadores que pagan el impuesto a las ganancias. Otra muestra más, de la sintonía fina o ajuste que el gobierno aplica sobre nuestras espaldas.
El impacto de Ganancias sobre los salarios representa más de un sueldo por año. Sumado a los trabajadores asalariados, también pagan Ganancias unos 100.000 jubilados y unos 400.000 autónomos.
Como no podía ser de otra manera, esta semana la Comisión de Diputados delega en el Poder Ejecutivo este tema del impuesto a las ganancias sobre los sueldos y jubilaciones y pensiones, cuestión que hasta ahora pasaba por el Congreso. No es para menos: casi el 20% de la recaudación estatal corresponde al impuesto a las ganancias, en segundo lugar detrás del IVA, que recauda casi el 28%.
De esta manera se confirma una vez más que la mayor recaudación por impuestos corresponde a los impuestos masivos, es decir a los que se cobra al pueblo trabajador. Esta y no otra es la intención de los monopolios y su gobierno kirchnerista: Ajuste con sintonía fina.
El mecanismo del impuesto a las ganancias al salario y a las jubilaciones y pensiones, que impone el gobierno a millones de argentinos es una aberración, se lo mire desde donde se lo mire; fundamentalmente porque el salario NO es ganancia para los trabajadores, es pérdida.
Queda claro que descontar el impuesto “a las ganancias” a los salarios, cuando en realidad los mismos son una pérdida para los trabajadores, es una medida que sólo puede caber en la lógica de un Estado que está enteramente al servicio de los monopolios.
(Recomendamos leer el folleto “El salario no es ganancia, es pérdida” publicado por nuestro Partido y que se encuentra en formato PDF en nuestra página web).