El día jueves, decíamos que ante la detención de los compañeros que realizaban el corte en Santa María, la movilización popular había logrado torcerle el brazo al gobierno de los monopolios. El mismo jueves un mar humano participó del acto en la Rioja para decir que el Famatina no se toca, que el pueblo argentino no quiere en nuestro territorio a los monopolios mega mineros.
El acto fue también una demostración de fuerza de un pueblo decidido a defender lo suyo, pese a que se intentaron todas las maniobras posibles para evitar que se llegara, se pararon colectivos a propósito, se intentó amedrentar a los vecinos, allí estuvo la gente masivamente repitiendo lo que hoy ya es una consigna nacional: NO A LOS NEGOCIADOS DEL GOBIERNO Y LOS MONOPOLIOS CAPITALISTAS, NO AL SAQUEO Y A LA CONTAMINACIÓN.
Como es lógico, esta situación pone al gobierno y a sus aliados en jaque, nada asusta más al capitalismo, ni a sus administradores que un pueblo movilizado, así atacados en todas partes de la Argentina por un pueblo que de esta manera ha tomado una actitud ofensiva. El día viernes nuevamente han demostrado su impotencia ante la imposibilidad de frenar este enorme avance en contra de su política, la respuesta fue, una nueva represión en Belén a vecinos que continuaban el corte selectivo para evitar la llegada de insumos a Mina Alumbrera. Esta vez, detienen a 18 compañeros si ningún motivo, aclarándoles ridículamente que luego se les buscarían los motivos de la detención. Agravado el caso por el hecho de que el juez que libró esta orden ni siquiera tenía fueros para hacerlo. Uno de los detenidos ni siquiera estaba en la zona del corte, estaba saliendo de comprar una gaseosa. El mismo Fiscal lo detuvo porque le consultó si tenía documentos y al contestarle que no, se lo llevó preso. Cuando consultaron cuál es la causa, se les respondió que “la causa ya la vamos a inventar” ¿Con qué orden judicial? “La orden soy yo” y se señaló la cabeza con el dedo índice.
Esta reacción del gobierno, nos dice claramente dos cosas. La primera muestra, sin tapujos, el carácter monopolista del Estado y su gobierno al servicio exclusivo de los intereses de los monopolios, donde sacan a jugar sus instituciones, ya sean policía, justicia, medios de comunicación, etc, para defender a ultranza los negocios millonarios de las empresas mineras en Catamarca.
El otro aspecto, la represión y la detención de los compañeros en Belén, no hace más que demostrar la debilidad del gobierno de los monopolios y su desesperación por cumplir con los compromisos económicos y políticos que tiene con las trasnacionales mega mineras, frente a un pueblo que no deja de luchar.
Es en esta coyuntura en la que sostenemos que es momento de que en todos los rincones de la patria se haga sentir un mismo reclamo, una sola consigna, que expresa no una denuncia sino una decisión irrevocable: No a los negocios de los monopolios megamineros ni de ningún otro, pues lo único que obtiene con esto nuestro país es más saqueo, mas contaminación, mas explotación.
El pueblo argentino está de pie, el terror que expresan las medidas desesperadas e incoherentes del gobierno en este momento así lo demuestran, pero esas reacciones desesperadas no van a frenar la lucha sino van a profundizarla y a generar más y más bronca. Los hechos hablan por nosotros. LA REVOLUCIÓN ESTÁ EN MARCHA