Los casi 25.000 habitantes de la ciudad agroindustrial de Villa Ocampo, 410 Kms. al Noreste de la capital provincial de Santa Fe, desde hace meses, se encuentran en estado deliberativo producto de la crisis política y económica producida por las políticas de concentración monopólicas y las disputas interempresarias por los subsidios del Estado, la permanente reducción del salario y los desquiciados e impunes negocios de los políticos de turno.
Mientras los monopolios mueven y ganan miles millones, la situación de los trabajadores y el pueblo se vuelve insostenible.
La dramática situación de los trabajadores de la papelera Norpapel que redujo los salarios un 40% y no garantiza los más mínimos requisitos de seguridad industrial, al punto que los días de lluvia el personal no trabaja por correr riesgo sus vidas, pero la empresa recibe religiosamente los subsidios y cuenta también con exenciones impositivas; el robo millonario de subsidios del frigorífico Vicentín Faenas que se declaró en quiebra y que en el juicio que le lleva adelante la AFIP dejó al descubierto la red mafiosa de favores políticos y pone en peligro 150 puestos de trabajo; el escandaloso negocio de los políticos con el traslado de la destilería Bioenergías Agropecuarias S.A., productora de alconafta que perteneciera al grupo industrial Arno, al Área Industrial sin ningún estudio de impacto ambiental y enteramente financiado con recursos del Estado nacional; constituyen el escenario donde el 5 del presente mes un centenar de trabajadores del Ingenio Azucarero Inaza – también subsidiada- del grupo Arno mencionado más arriba, cortaron la ruta nacional 11, frente a la vivienda del “dueño” de la empresa reclamando el pago de los aumentos salariales atrasados desde mayo, ropa de trabajo y normalización de los trabajadores en negro.
Con el apoyo de la comunidad, los cortes continuaron los días siguientes pese a los aprietes y provocaciones de matones de la empresa.
Luego de 5 días de firme lucha, la empresa y sus instituciones cedieron, lográndose así el pago de la totalidad de lo adeudado, la prohibición por el término de 4 años de realizar despidos sin causas al personal permanente involucrado en el conflicto y la regularización de todos los trabajadores en negro.
Este triunfo alimentará la decisión de lucha de los trabajadores y el pueblo, en el camino emprendido por la reafirmación de su dignidad.