La catarata de informaciones que abruman el pensamiento humano tiene como protagonista la No Noticia.
¡Qué curiosa contradicción!
Noticia-no noticia.
A grandes rasgos todo nos lo presentan como una idea única. Un pensamiento único, televisión, radio, diarios, etc. entretejen maravillosas “películas de la vida cotidiana” algo así como sainetes coloridos, pincelados con finos trazos…pero con una cualidad que sobresale, “obras” diarias sin los protagonistas centrales
Es verdaderamente un arte “extraordinario” que en 365 días al año existan noticias a granel sin siquiera los actores fundamentales de las historias.
Pongámonos a reflexionar y verdaderamente es un “arte” reproducir noticias-no noticias. Vidas cotidianas, sucesos cotidianos sin protagonistas cuando los mismos superan las 40 millones de almas.
Reconozcamos que es un “arte” y el mismo tiene responsables, literalmente hablando: los dueños de los medios de comunicación.
Son “señores empresarios” que dejaron ya hace mucho tiempo la unipolaridad de la información, ahora los medios, mal que les pese a los defensores de la ley de medios, están en manos muy concentradas de negocios globalizados. Más allá de sus guerras internas por intereses, los une un común denominador, un arte muy especial de hacer historias sin la sociedad humana.
Todo pasa en este mundo convulsionado por el “capricho de dioses ocultos”, las consecuencias de una información sepultan las causas que la generan.
“En el diario no hablaba de ti…” dice una canción popular. ¡Qué gran verdad!
Parecería ser que viajar en las condiciones extremas que viajamos para ir a nuestros trabajos y de allí a nuestras casas no es noticia. Tampoco lo es la forma en que trabajamos, no es noticia es noticia la decadencia en educación y salud.
Lo peor, que jamás es noticia, es que de la lucha que llevamos los argentinos por conquistar una vida digna, sólo aparecen los “protestones oportunistas” del propio sistema que ocupan las primeras planas de las informaciones. Nada se dice de las huelgas, de paros, del corte de rutas contra la infamia de los monopolios por saquear al hombre y la naturaleza. Esa información que nos dignifica se oculta.
Ahora bien, cuando el gobierno tiene que tomar medidas contra el pueblo resulta que están bien al tanto del humor de la gran mayoría del pueblo. Tienen que firmar decretos, leyes, resoluciones y como en este caso exponer a un presidenciable como Capitanich para hacer el juego sucio.
Lo que ocultan es que para que estos personajes, el firmar ajustes, como lo están haciendo, implica poner en escena lo que ellos quieren ocultar. Aparecen los actores verdaderos, los obreros, los estudiantes, los pueblos originarios, los defensores de la riqueza natural, las barriadas y es allí en donde estos “señores” se vistan de lo que se vistan les comienza a temblar el pulso.
Imaginémoslos a los “señores” del poder tener que tomar decisiones de ajuste alrededor de una gran y lujosa mesa. Seguramente no se guíarán por los diarios y las informaciones que ellos venden al pueblo. Sus manos son temblorosas así como sus rostros al saber que empresas autopartistas están paradas, que no hay fábrica que no exija una recomposición salarial, que la comunidad educativa se abre camino con los petroleros del sur, que el ahora gobernador del Chaco se enfrenta a una protesta generalizada y organizada cortando las rutas de su provincia etc., etc.
“Señores del poder” la lucha de clases sólo se esconde a los ojos desprevenidos, pero se siente, parafraseando algunas de sus propagandas predilectas elaboradas en sus centros de Marketing. El que ustedes intenten firmar ajustes, lo saben, es en respuesta a un pueblo rebelde que de una u otra manera no deja de condicionarlos para que ustedes puedan satisfacer sus jugosos negocios. La moneda sigue estando en el aire.