El día 11/2/2015 falleció Daniel Aguilar obrero de la fábrica Gafa (actualmente Electrolux), en Rosario, Pcia. de Santa Fe, después de 6 días internado con el cuerpo destrozado a causa de un «accidente´´ en planta en momentos en que el compañero se encontraba haciendo horas extras durante la madrugada, seguramente con el cansancio y las presiones de la producción a cuesta, fue aplastado por una máquina termofusora que según se sabía tenía fallas en su funcionamiento.
Los trabajadores sabemos que no importa en qué condiciones un «accidente´´ pueda suceder siempre la empresa tratará, de alguna manera, echarle la culpa al trabajador o al menos asignarle parte de la responsabilidad sobre lo sucedido. Esta acción de las empresas tiene como necesidad ocultar la verdadera causa de los «accidentes´´ y de nuestros padecimientos. Esta causa no es ni más ni menos que las condiciones de trabajo o mejor dicho de superexplotación que ellos, la burguesía, nos imponen a los trabajadores. Son ellos que nos empujan a una vida miserable, son ellos los que nos empujan a la muerte por lo que no se trata de «accidente´´ sino de asesinato.
Ante este nuevo asesinato empresasindicato (UOM) y Estado (con sus instituciones: secretaría de trabajo, policía, funcionarios de gobierno entre tantos otros) ocultaron y taparon todo con la complicidad de los medios de comunicación (canales de televisión como el 3, el 5, los de cable, diarios como La Capital y otros medios) que ante este acontecimiento tan grave que refleja la realidad en que vivimos los trabajadores y el pueblo, siguen haciendo silencio mientras llenan sus espacios con el caso Nisman además de un sin fin de trivialidades para desinformar a la población.
Lo sucedido con el compañero generó bronca e indignación de los obreros de la fábrica ante lo que el sindicatoempresa actuó tratando de poner paños fríos a la situación diciendo que la tarea que le costó la vida al compañero ya no la harían más los obreros de producción sino que correspondería a mantenimiento…(resolución que no resuelve nada, hecho lógico considerando que no es objetivo de ellos resolver los problemas a los trabajadores sino cuidar los intereses de la empresa, pero tratando burdamente de aparentar lo contrario).
El día que fallece el compañero la decisión de la empresa fue no producir y dar los días a los trabajadores de miércoles al viernes que sumado a sábado y domingo y 2 días feriados volverían a la fábrica después de una semana, una evidente maniobra obligada para descomprimir la situación.
Los trabajadores somos los únicos interesados junto con el pueblo en cambiar esta realidad de miseria, explotación y muerte. Con ese fin tenemos que tener muy en cuenta dos hechos centrales que aquí se reflejan
Podemos decir que el primero es la profundización de los niveles de superexplotación a que nos someten, con una interminable lista de consecuencias para nosotros que van desde aumentar nuestros sacrificios solo para seguir subsistiendo hasta casos de lesiones graves o muerte (como en General Motors, en esta misma semana pasada, con 2 compañeros quemados de gravedad o las muertes en Acindar y de otras empresas de la zona de las que no dicen nada).
Ésta es una política que la burguesía busca implementar en toda la industria y a su vez en toda la población, no se trata de la mala voluntad o descuido de algunas empresas, se trata de empresa sindicato y Estado trabajando y planificando para bajar la masa salarial pagada a los trabajadores por las vías que le sean posibles, quieren que trabajemos más y en peores condiciones por igual o menos plata (ésa es la productividad de que habla la presidenta con los empresarios).
La segunda sería la debilidad política que tienen para imponernos sus planes, debido al estado de movilización y lucha del pueblo y de la clase obrera que viene torciéndole el brazo a la burguesía en muchos conflictos a lo largo del país en los que ellos tienen mucho que perder enfrentándonos. Ellos están perdiendo terreno y los trabajadores vamos avanzando.
El miedo que han demostrado ocultando los hechos de manera burda y la desesperación por calmar a los trabajadores sacrificando días de producción evidencia su debilidad, su temor frente a nuestra clase está bien fundado.
Teniendo bien presente cuáles son sus verdaderos motivos y cuáles son sus debilidades, tenemos lo que necesitamos para derrotarlos con la unidad y lucha de nuestra clase. Estos crímenes contra nosotros no quedaran impunes, tenemos que construir nuestras propias fuerzas para que no puedan empujarnos a más superexplotación y muerte.