El proceso revolucionario abierto a finales de la década de 1960 se profundizó en forma acelerada hasta mediados de los ’70 en que grandes sectores de la clase obrera y el pueblo, dirigidos por su vanguardia revolucionaria, cuestionaron el poder de los monopolios y de su gobierno reaccionario.
El golpe de Estado fue la medida tomada por la oligarquía financiera a través de su Partido Militar para detener ese proceso revolucionario que avanzaba hacia el socialismo. A partir de allí, la profundización de las medidas antipopulares a favor de lo más concentrado de la burguesía monopolista no tuvo solución de continuidad hasta nuestros días. La misma clase que impulso el golpe es la que expropia, oprime y al pueblo trabajador. Sólo las luchas del pueblo se interponen y frena la aplicación de esas políticas y su acción los ha arrojando al pantano de la crisis política.
Lo anterior significa dos cosas:
1- Que constituye una gran mentira lo que el gobierno, la burguesía y sus intelectuales llamados «progresistas» más el coro de la gran maquinaria de medios de difusión se empeñan en repetir con el fin de hacernos creer que los revolucionarios y las grandes masas populares que fueron brutalmente reprimidos por la dictadura más sangrienta que la historia argentina recuerde, lucharon por esta fantochada de democracia que ahora vivimos y sufrimos.
2- Que la única salida que este pueblo tiene para la situación de oprobio, explotación y creciente inseguridad y pobreza que vive, está en continuar esa inconclusa aspiración a un cambio profundo que nos conduzca a una vida digna para las mayorías trabajadoras y sufridas de este pueblo argentino, lograble sólo con la revolución y el socialismo.
Es por eso que rescatamos la lucha revolucionaria abierta en aquellos años, reconocemos su continuidad en cada lucha cotidiana que la clase obrera y el pueblo desarrollan contra el poder de los monopolios y nos comprometemos cada vez más con ellas en cada frente de lucha en donde fundimos el proyecto revolucionario con las masas populares ávidas de lograr sus objetivos de una vida digna.
Por todo eso decimos sin titubeos que la revolución está en marcha.
¡¡¡POR LA UNIDAD DE TODOS LOS TRABAJADORES Y EL PUEBLO!!!
¡¡¡VIVAN LOS 50 AÑOS DEL PRT!!!