Tipoití es la textil más grande de Sudamérica, ubicada en la provincia de Corrientes. Los trabajadores llevaban varios días protestando en la puerta de la fábrica, en un acampe. El día 9 de Julio, en medio de los «festejos» del gobierno por el Bicentenario de la Independencia, inician un paro. En un comunicado de prensa (que transcribimos textualmente) la Comisión Interna de la textil Tipoití informa que la medida tiene un 100% de acatamiento y expresa:
«Desde el sábado 9 de julio a las 22 hs., se inició en Tipoití un paro por tiempo indeterminado, con un 100 % de acatamiento en todos los turnos rotativos. Estamos demostrando así el hartazgo ante tanta explotación, la unidad del conjunto de los trabajadores y nuestra decisión de lucha. Hace mucho tiempo que no se desarrollaba una lucha de este tipo en la fábrica, donde hay una constante y numerosa movilización y presencia en la puerta. Por fin nos decidimos a levantar la cabeza. De esta manera, hemos profundizado el reclamo salarial que se desarrolla hace 2 semanas, debido a la falta de acuerdo en la paritaria vencida el 31 de mayo.
La patronal propone un 30 % anual, como acordó la AOT a nivel nacional. Como rige el Convenio de Empresa, desde la Comisión Interna planteamos el reclamo aprobado en asambleas generales de todos los turnos: 40 % de aumento a la hora básica; 1,2 % por cada año de antigüedad (lo mismo que la empresa paga en la desmotadora de Pinedo, Chaco), 100 % adicional por cada hora trabajada en sábado y domingo; monto fijo para el premio a la productividad, que se actualice proporcionalmente a la hora básica. Luego de ello, demostrando buena voluntad, los trabajadores flexibilizamos algunos reclamos, pero nos encontramos con la cerrada postura de la empresa.
Tipoití es uno de los principales establecimientos fabriles de Corrientes, que cuenta con 700 obreros. Conocemos en forma directa que Tipoití produce por día 70.000 kg. (70 toneladas) de hilados. El precio de esos hilados va de $ 30 a $ 150 el kg. Eso se produce con el sudor y el esfuerzo de los trabajadores que trabajamos todo el año en turnos rotativos, con altos ritmos, y con un salario promedio de $11.000, que está muy lejos del costo de la canasta familiar.
Según los cálculos de los trabajadores del INDEC, en la región NEA (al mes de mayo) ningún trabajador puede ganar menos de $ 16.979 (de bolsillo) por mes. Eso es lo que necesita hoy un trabajador para vivir dignamente. Varias estimaciones (entre ellas el IPC de Capital Federal y San Luis, el IPC Congreso, los índices de las centrales sindicales) indican que la inflación de este año va a superar ampliamente el 40 %. Ante esta situación, en varios gremios del país lucharon y consiguieron aumentos importantes, como aceiteros, bancarios, camioneros, etc.
Queremos agradecer la enorme solidaridad de varias organizaciones sociales y sindicales, así como de la comunidad en general con esta justa lucha tan demorada.
Somos los que producimos la riqueza, luchamos por un salario digno.
Comisión Interna de TIPOITI«
La medida pone sobre la mesa además, un reclamo de años: que les devuelvan los ítem que les fueron sacando, ya qué al tener un cuarto turno les corresponde según el Convenio un mayor porcentaje, tanto en las horas de los sábados y los domingos, cómo en el resto de toda la grilla. Se cobran 43 pesos la hora… eso sí, los sábados y los domingos la multinacional «es justa»: les pagan 3 horas «de más»…
Nos decía un trabajador: «Si sabemos qué la fábrica gana 4.500.000 pesos por día, y el aumento qué le pedimos es de alrededor de 400.000 pesos por mes, la empresa tendría que tener cuidado, porque como decían nuestros abuelos, «la ambición rompe el saco». El costo de la crisis económica del sistema capitalista no la podemos pagar los trabajadores y el pueblo, porque somos los que menos tenemos; ya es hora de que la paguen los qué se quedan con todo lo que producimos los trabajadores. ¡¡¡Chaqué cheraa… (Tené cuidado chamigo), con la unidad de todos y resolviendo en asamblea, nos hacemos más fuertes!!!»
En el día de mañana se realizará una movilización a la casa de gobierno. El pueblo todo apoya la huelga.