VW tiene ambiciosos planes de producción a nivel mundial (en 2016 superó a Toyota convirtiéndose en la número uno del mundo) y la planta ubicada en la localidad de Pacheco no está por fuera de eso. La Argentina se perfila, ya públicamente, como un polo de producción de pick-up y eso lleva grandes compromisos que las multinacionales asumen ante los mercados del mundo. Para ello necesitan avanzar en función de mayor explotación aumentando la productividad a como dé lugar y van a intentar presionar utilizando las más cobardes e infames maneras.
Resulta ser que nada les alcanza, el año pasado cerraron el turno noche, suspendieron personal en forma rotativa durante casi todo el año, extendieron la jornada laboral, mejoraron los indicadores de calidad y productividad, se desprendieron de varios operarios con el retiro voluntario y las pre jubilaciones, implementaron un nuevo sistema de trabajo en todo mantenimiento donde te toca un fin de semana libre cada 4 meses y medio. Y siguió sin alcanzarles, pero bien saben que nada de eso se nos borra de la retina a los trabajadores de la planta y si bien toman medidas en nuestra contra le temen a que esa bronca se exprese y los trabajadores tomemos un rol protagónico en cuanto al ir por condiciones realmente dignas de trabajo.
Ahora confirman que tenemos “estabilidad” laboral hasta junio de 2018 y que para antes de fin de año se le asignará a la planta un modelo nuevo para producir. Así y todo también nos dicen que van a suspender a 600 compañeros en forma fija y que nosotros los trabajadores tenemos que poner el esfuerzo para “sacar esta situación adelante”.
¿Cómoes que hay estabilidad laboral, un modelo nuevo en marcha y suspenden a personal?
¿Acaso la empresa dejó de ser rentable el año pasado?
¿La plata que invierten, en realidad, no les genera más dinero?
¿Las unidades que producimos no les generan ganancias millonarias?
Nos piden que los trabajadores pongamos el lomo para aguantar y nosotros nos preguntamos: ¿La empresa que esfuerzo hace?
Claramente es una nueva maniobra para intentar dividirnos como lo hicieron con las suspensiones del 2001 para que, con la excusa de su sobrante en la plantilla, intentar avanzar sobre las condiciones de trabajo y achatamiento del salario. Todo esto NO está por fuera del ajuste que a través del Estado las multinacionales están impulsando para avanzar en nuestras conquistas que como clase obrera y pueblo en su conjunto supimos conseguir.
Así como la empresa va a utilizar todas sus herramientas en función de su interés mezquino es imperioso que como trabajadores mantengamos la alerta permanente y no dejemos que nos ponga por delante sus objetivos ya que como obreros nosotros tenemos que tener los nuestros. Queremos:
Trabajar dignamente sin la presión de tener compañeros suspendidos. Acá lo único que sobra es la plata de VW.
Que las decisiones no se tomen por nosotros. Si todo lo producimos todo lo decidimos.
Un salario digno.
Elegir a nuestros delegados.
Defender y hacer respetar el Convenio Colectivo de Trabajo.