A escasos días de haberla anunciado el gobierno de los monopolios, la clase obrera y amplios sectores de la población no ven en las reformas laborales, previsionales y tributarias otra cosa que un descomunal ataque a las condiciones de vida y a las conquistas laborales y sociales. Gana lugar el estado deliberativo. En cada conversación, en cada reunión, en cada asamblea y en cada debate, el repudio y el cuestionamiento a este conjunto de medidas-profundamente reaccionarias- aparece por delante.
Este escenario se acentúa aún más, por cuanto todo este conjunto de medidas borra todo manto de piedad que pretendidamente los estamentos dominantes de la burguesía monopolista en nuestro país han construido desde lo ideológico para disimular las aberraciones del régimen capitalista.
Años de conquistas laborales y sociales, producto de la tenacidad y el enfrentamiento, del sacrificio y hasta de la vida de miles de trabajadores y amplios sectores populares, a lo largo de las últimas décadas, pretenden ser borradas de un plumazo. De allí que sea inevitable el estado de repudio que se desenvuelve por abajo, de allí que con estas reformas el mirar para adelante signifique más y más estrangulamiento de las condiciones de vida.
El ataque al populismo que Macri y sus Ceos mantienen como paradigma de las transformaciones y la modernización, el abrirse al mundo y el bla bla bla.. de todo su discurso en el que se descree cada día más, no está asociado a los K sino, más concretamente el ataque a las conquistas populares y sociales. En todo caso los k están siendo utilizados como emblema para disimular el fondo de la cuestión: en esta embestida son los partícipes necesarios al igual que las cúpulas de la CGT.
El macrismo califica con el mote de populismo a toda la suma de dichas conquistas, como por ejemplo exponer de anormal la edad jubilatoria actual, de allí que busca aumentarla. Incluso también lo son los conceptos de trabajo y salario por ello buscan modificar y adecuarlos a las condiciones del régimen de explotación y sometimiento y ganancias que demandan los monopolios. Buscan además desmembrar el artículo 14 bis de nuestra constitución y quebrantar su amparo como ley y como conquista política y social lograda por nuestro pueblo.
Al amparo de su propia anarquía, de la crisis en sus negocios, de la guerra intermonoplista, de la crisis política, de las repulsas populares que abarrotan el escenario mundial con más y más luchas, en suma, en el marco del estado de indefeccion del capitalismo a nivel mundial, buscan privilegiar sus negocios a como dé lugar, en un escenario donde la sustentabilidad -utilizando sus propios términos- es una gran mentira que ni ellos se creen.
En su viaje a Nueva York, Macri y unos cuantos ceos más, van a rendir cuentas a Wall Street y mostrar sus buenos modales con los compromisos asumidos. Allí se encarna la anarquía imperante y se patentiza la insustentabilidad. Es allí donde se referencia que las únicas soluciones viables para sus negocios inmediatos, porque hoy ya no los hay a largo plazo, como ser pago de deudas, estafas financieras, ganancias extraordinarias, despilfarro y destrucción de fuerzas productivas, excesos de todo tipo con su correlato de medidas anticonstitucionales violando la propia legalidad burguesa, atacando el mismo orden burgués, o sea capitalismo en toda su decrepitud y decadencia en toda su crudeza y dimensión, solo se resuelven con más explotación, más empobrecimiento, más humillación para los trabajadores y el pueblo.
Por todo lo dicho, los monopolios y su gobierno van por la denigración de las condiciones de trabajo y de vida, que es lo único que pueden hacer para sostener sus ganancias. Es claro que, sin las más variadas iniciativas de movilización y acción por abajo, en fábricas y barriadas, el necesario enfrentamiento a estos planes seguirá un curso deliberativo. El enfrentamiento de clase contra clase pasa por un marco de iniciativas que deberán generalizarse y multiplicarse en cada lugar, sin respiro y sin pausa. Organizarse para la iniciativa y a partir de allí ampliar la organización y ampliar la movilización. Ampliar el marco de fuerzas para el enfrentamiento de todo el pueblo.