La lucha de clases arrecia aunque no lo parezca, y termina colocando a la burguesía monopólica en opiniones dispares donde sus propias ambiciones y objetivos se ven contradecidos entre las medidas que toman, las que intentan tomar y lo que la política les puede deparar en un futuro no muy lejano poniendo en riesgo su gobernabilidad y con ello sus negocios.
A saber. Ellos, con el supuesto gradualismo en 2 años de gobierno, y asentados en el discurso de la herencia se encuentran en el dilema de asestarle al pueblo todos los días un nuevo golpe a los bolsillos, donde así, por ejemplo, estamos frente a un nuevo tarifazo de luz, gas y combustibles, en un contexto de agravamiento de la situación política marcado por dos hechos políticos de suma trascendencia y gravedad, un marco de enfrentamiento contra las reformas de los trabajadores que recién comienza, y una disconformidad y controversia de los intereses inter burgueses que pujan entre sí por imponer sus necesidades.
La desaparición del submarino con 44 víctimas y una impericia (desde los intereses de la burguesía) en el tratamiento antela opinión pública por parte del gobierno, que lo único que logró es generar un manto de sospechas sobre sí mismo, desde las mas sensatas hasta las más “inverosímiles” que los llevó a desacreditarse al grado tal de que los familiares (y con mucha razón) terminen oponiéndose a la conducta oportunista del gobierno de decretar duelo nacional cuando persiste la incertidumbre de qué fue lo que pasó. Esto nos hace recordar al nefasto Balbín que en plena época de la dictadura lo mandaron a Europa a decirle a la prensa mundial “No busquen más a los desaparecidos porque están todos muertos”, es decir, estaba en conocimiento de lo que asaba.
El otro hecho político también de extrema gravedad por la impunidad, es el asesinato por la espalda de Rafael Nahuel donde la Ministra de Seguridad, Burlich, sin medir consecuencias, llevó a afirmar que: “El gobierno no tiene que probar lo que hacen las fuerzas de seguridad”. Dichos estos que, de hecho, reafirman y confirman las actuaciones sobre el caso Maldonado, lo que motivó todo este armado de la mentira aunque no haya dudas de que a Maldonado lo mató gendarmería. El presidente felicitó a la ministra.
Ante esta situación, recurriendo a la vía mediática, lo que intentan es dividir al pueblo generando un doble discurso, instalando ante la opinión pública que los muertos de un caso (los 44 tripulantes) o del otro (Maldonado-Nahuel), tienen mayor o menor justicia, tratando de parodiar e instalar “una neo teoría de los dos demonios”. Pero en lo que son peras o manzanas, los muertos están y con ello la perversidad de escapar de sus responsabilidades de asesinos en un caso y en el otro.
Estos hechos no están por fuera, más bien son parte, del mar de fondo de la lucha de clases, pues la clase dominante insiste en avanzar con sus planes a cualquier costo pensando que les iba a resultar un paseo por sus triunfos electorales. Pero los hechos demuestran que no es tan así. La movilización y la confrontación de los trabajadores y el pueblo comienzan a poner en blanco sobre negro el presente y un oscuro horizonte que, sin ninguna duda, ya condiciona la gobernabilidad y los planes de la burguesía como ellos quisieran.
La lucha de nuestra clase obrera y trabajadores en general está viniendo de menos a más, donde el estado de movilización no es solo lo que expresan las grandes concentraciones. Muy por el contrario, es mucho más profundo pues se da en miles de pequeños hechos en los lugares de trabajo, en la permanente búsqueda de cómo organizarse para enfrentar y poder dar un quiebre en la correlación de fuerzas; y un sinnúmero de pequeñas movilizaciones de carácter local. Resistencia que más tarde o más temprano se condensará en un nuevo e ininterrumpido auge.
Al ya decaimiento en las condiciones de vida, el macrismo avanza con los tarifazos y pretende imponer reformas en un transitar de errores políticos que lo llevan a dejar al desnudo su carácter autoritario, que no solo produce el rechazo de las grandes mayorías, sino también de sectores que le dieron un voto, lo cual genera las condiciones más propicias para quebrar la división que quieren imponer con sus mentiras a todo el pueblo argentino.