Producir lo necesario para cubrir las necesidades de nuestro pueblo. Trabajadoras y trabajadores sabemos bien lo que es esencial o indispensable. Basta de producir para exportar.
En aquellos sectores esenciales exigir que se cumplan las condiciones sanitarias adecuadas.
Defender nuestros salarios. Ninguna rebaja salarial y aumento acorde a la canasta familiar.
Ni un solo despido.
Pase a planta de todos los trabajadores requeridos para la producción y demás trabajos que sean necesarios para cubrir las necesidades básicas de la población. Fundamentalmente en el área de la salud e higiene, alimentación, servicios públicos y generación de energía, así como la logística para todo ello.
Que se garantice un plan inmediato de salarios al enorme número de trabajadores en negro y precarizados.
Aumento inmediato de las jubilaciones para que lleguen a la canasta familiar.
Retrotraer los precios previo a la crisis y que se congelen de verdad. Basta de anuncios que no se cumplen.
No pagar impuestos ni tarifas por seis meses, y que eso no genere deuda futura.
No a las fuerzas represivas en las calles, a su política de control social y de guetos en los barrios. Ellos velan por la defensa de los grandes monopolios. Solidaridad de clase para atravesar la cuarentena.
Ayuda estatal por seis meses para el sostenimiento de pequeños comercios, talleres, emprendimientos independientes, etc. para sostener los puestos de trabajo y los ingresos de las trabajadoras y trabajadores ante la voracidad del capital financiero.
Transporte gratuito para quienes garantizan la producción básica y el actual funcionamiento del país, fundamentalmente en el campo de la salud. Basta de exponer a los choferes, que los empresarios se hagan cargo.
Todos los recursos que generamos deben disponerse para superar la pandemia y aliviar a la gran mayoría de la población. No al pago de la deuda externa. La plata está. La tienen los sectores más concentrados y enriquecidos del país que por décadas les fue transferida impunemente por los gobiernos de turno.
Durante la cuarentena y mientras dure la crisis que estamos viviendo la clase trabajadora y el pueblo, multiplicar los reclamos y visibilizar las denuncias de todo atropello que nos afecte.
Profundizar la democracia directa, autoconvocarnos y organizarnos por abajo para enfrentar y resistir activamente todo intento de hacer recaer la crisis sobre los explotados y oprimidos.
No olvidar que la pandemia va a pasar. Preparar la movilización para que la crisis generada por los monopolios y sus gobiernos la paguen ellos.