La vida de las y los trabajadores y sectores populares está cada vez más difícil e insoportable.
Por un lado los empresarios ajustan la flexibilización aún más a los trabajadores, cargándonoslos con más trabajo en la misma jornada laboral y rotándolos por todos los sectores (polivalencia). Como así también están intentando implementar rebajas salariales de hasta el 50% o no aceptar las paritarias de este año porque dicen que si no van a tener que despedir. Es decir, una reforma laboral que no pudieron concluir con Macri ahora la quieren aplicar con el actual gobierno.
Mientras tanto las centrales obreras y gremios, con su estilo cómplice del ajuste, están escondidos con la excusa de la pandemia posponiendo las paritarias y cualquier tipo de medida, tanto en el sector privado, por ejemplo en la UOM, como así también en el Estado, es el caso de los trabajadores municipales, docentes, médicos, etc.
La inflación aumenta al mismo ritmo en que el hambre se hace notar en cada olla popular que aumenta las porciones día a día. Y para colmo no bajan la cantidad de mercadería para repartir a las familias y comedores.
En un relevamiento de la APDH de La Matanza, informa que en 26 espacios de nuestro distrito entre comedores y merenderos comunitarios que demandan 4310 bolsones de alimentos.
El IFE (ingreso familiar de emergencia), aparte que de por sí es una burla para las familias que no tienen ningún tipo de ingreso, más que ayuda es una forma de que no se les pudra el rancho. Eso sí hay ATP (asistencia al trabajo y la producción) para más del 70 % de las empresas inscritas.
Mientras tanto desde el municipio, con Fernando Espinoza a la cabeza, desalojan feriantes y manteros en toda la Matanza, dejan sin agua y sin luz a los barrios, reprimen y hacen oídos sordos a todos los reclamos que surgen desde distintos sectores en lucha que de una u otra manera vienen resistiendo.
El sector de Cambiemos, de forma oportunista, intentan llevar el descontento del pueblo por carriles sin salida, y de paso sumar unos votos.
La crisis capitalista se muestra con total crudeza que, si bien ya existía antes de la pandemia, está vino a profundizar lo que ya se estaba dando. Pero como ya lo venimos sufriendo gobierno tras gobierno, las crisis siempre son descargadas sobre el lomo de las y los trabajadores.
Golpear como un solo puño
¿Cómo resistir este ataque a los trabajadores y el pueblo?
Desde cada lugar de trabajo y de vida debemos organizar la bronca y la indignación que generan los de arriba con sus políticas de ajuste.
Realizar asambleas por sector para organizar la lucha en reclamos concretos, ya sean por mejoras salariales, mejores condiciones de trabajo, etc. En los barrios y sectores populares es la misma metodología con sus reclamos concretos, ya sea por un ambiente sin contaminación, contra la represión, contra los desalojos a los feriantes y vecinos de las tomas, etc.
Si bien la lucha en un principio puede ser sectorial, debemos apuntar rápidamente a aunar las luchas con las demás trabajadores y vecinos de los barrios.
Así como políticos, empresarios y gremios nos atacan como clase, debemos dar la misma respuesta como una necesidad en los tiempos que corren, de golpear masivamente y como un solo puño para asegurarnos la conquista de nuestros reclamos, hacerles pagar el costo político de años de opresión y ajuste y principalmente la de ir conformando un foco de resistencia activa en La Matanza.
SOLO EL PUEBLO SALVARÁ AL PUEBLO
LA OTRA CAMPANA / Boletín político informativo del PRT Matanza / 14/08/2020
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