Los trabajadores de Limpiolux estuvieron en la primera línea contra el Covid-19, al servicio de Toyota. No olvidemos que, sin los protocolos, la planta no arrancaba a producir y los trabajadores de Limpiolux estuvieron al frente para garantizarlo. Muchas veces hacen operaciones que son parte de la línea y cobran miseria ¡¡es una vergüenza total!!
Estos trabajadores están precarizados y cobran $26.000 de sueldo básico; por eso exigen un aumento para pasar a cobrar a $40.000. El viernes se realizó una asamblea y los operarios se agarraron con la delegación del sindicato de Maestranza, ya que la propuesta del mismo era una burla. Después de estos hechos el sindicato se borró y los trabajadores armaron las redes e hicieron las banderas en las que reclaman un salario digno. Reclamo y acciones desde abajo se multiplicaron por toda la planta. Y aunque no en forma colectiva es vista con simpatía por muchos trabajadores de Toyota.
Hoy en día, con el alza de precios le preguntamos a Herrero, CEO de Toyota, y a los hermanos Pelusso, dueños de Limpiolux y varias empresas más: ¿ustedes pueden vivir con un básico de $26.000?
Decía Herrero al diario El Cronista el 23 de octubre pasado:
“Cuando uno tiene una situación tan difícil, el gran tema es la incertidumbre. El líder es quien tiene que salir a dar tranquilidad; generar confianza en el equipo…Sabíamos que, cuando arrancáramos con la producción, muchos íbamos a recibir alguna crítica. Sobre todo, por la dicotomía entre salud y economía. Nosotros respondíamos que es economía con salud”, agregó. “Ni yo tenía tanta certeza de que todos fueran a cumplir en la planta el protocolo, porque es bastante estricto. Pero lo respetaron de una manera increíble y, hoy, estamos trabajando con dos turnos, normal, y con una eficiencia, incluso, mayor a la que teníamos antes de la pandemia”. Agregó que el trabajo hecho por todo el sector para haber logrado eso “es valedero como modelo de país: diálogo, consenso y trabajar codo a codo es lo que nos permitió salir adelante”.
Nos habla de economía y salud, y los trabajadores nos enfermamos, asumimos los riesgos, mientras cobramos miseria y aumenta la productividad.
Con el aumento del dólar nuestros salarios fueron despedazados en relación con los precios de las camionetas que se exportan. ¿De qué consenso nos habla, si los trabajadores nunca decidimos?
Los trabajadores de Toyota tampoco están conformes con su salario, ya que como dice Herrero, “creció la eficiencia” pero lo que no crecen son nuestros salarios.
La unidad desde abajo de todos los trabajadores de Toyota y las contratistas o tercerizadas es fundamental. Todos laburamos para la producción de la Hilux, todos merecemos un salario digno. Profundicemos la unidad y todo tipo de acciones.
¡¡¡Metamos presión!!! ¡¡¡AUMENTO DE SUELDOS YA!!!