Este jueves 12 de mayo se aprobó en la Legislatura porteña, represión mediante, el proyecto de reforma del Estatuto Docente en la Ciudad. Esta reforma no es otra cosa mas que una ley de flexibilización laboral para la docencia, que ya viene siendo ajustada hace años con la implementación de la NES, la “Secundaria del Futuro”, la implementación de plataformas virtuales que recargan a las y los docentes de tareas burocráticas, etc.
La reforma crea cargos en el nivel inicial, denominado maestra/o especialista; en primaria el cargo Maestro Coordinador de Trayectorias Escolares; y en media el cargo de preceptor tutor. El proyecto no especifica las funciones de los cargos, tampoco contempla la forma de acceso ni la cantidad de cargos a crear. Para acceder, se deberá realizar un curso específico, sin explicitar cuales son los contenidos, quienes accedan cobraran un plus en el salario, generando una diferenciación salarial y promoviendo la división entre los trabajadores de la educación. La ausencia en la reforma de la creación de cargos para Educación Especial, ratifica una vez más la política de cierre de escuelas de esa modalidad, con el demagógico planteo de la inclusión plena.
Con esta modificación del Estatuto Docente impuesta sin consulta, donde los sindicatos auspiciaron de garantes, se profundiza la flexibilización laboral en materia educativa y adapta los contenidos educativos de acuerdo a las necesidades del capital. El gobierno de la cuidad, enmarcado en la Ley de Educación Nacional y las resoluciones del Consejo Federal de Educación, viene aplicando reformas regresivas hace años. Que en los ya de por sí manipulados planes de titularización se excluya particularmente a las y los trabajadores de Educación Superior es una decisión política para vaciar el área y avanzar en el cierre de los Terciarios (Institutos de Formación Docente e Institutos de Formación Técnica Superior) intentado imponer definitivamente la Unicaba.
De más está decir que la normativa no contempla resolver ningúno de los problemas que existen en educación, y que también hacen a la flexibilización laboral de hecho en escuelas y educación superior: aulas superpobladas, condiciones edilicias deficitarias y ausencia de vacantes (50.000 alumnos sin vacantes solo en CABA).
Todas estas medidas, los graves problemas de infraestructura en muchas escuelas, los salarios por debajo de la inflación, la flexibilización laboral y la falta de presupuesto en educación son parte del vaciamiento de la educación pública y ajuste que nos imponen a todo el pueblo. La única forma de revertir esto, ya que los gremios siempre terminan llevando las luchas a callejones sin salida por vericuetos inconducentes y burocráticos, es involucrarnos construyendo instancias de poder local, debatiendo en cada aula, en cada establecimiento, generando unidad entre todos los niveles y con toda la comunidad educativa.
¡¡No a la UniCaba!!
¡¡Titularización masiva en todos los niveles y para todos los cargos!!
¡¡Participación y decisión de la comunidad educativa en las reformas en educación!!
¡¡Aumento salarial acorde a la canasta familiar: ningún/a docente por debajo de la línea de pobreza!!