Corrido del centro de atención de la prensa internacional, hoy ocupada por las bestiales consecuencias sobre los pueblos de la guerra interimperialista en Siria, Irak, Libia, Yemen, Nigeria etc., continua el sistemático plan de exterminio llevado adelante por el Estado de Israel sobre el pueblo palestino en la Franja Gaza.
Ya pasaron seis meses de la brutal operación militar llamada «Margen protector», lanzada por el Ejército israelí sobre un territorio similar en extensión, al municipio de La Matanza y 1.800.000 habitantes, con fuego de aviación y artillería naval, y que produjo 2.130 muertos palestinos, en su gran mayoría civiles y una cuarta parte de ellos niños, y más de 11.000 han resultado heridos.
El ataque fue dirigido especialmente a destruir todo lo estratégico y elemental para la vida del pueblo. Así, destruyeron la totalidad de los hospitales y escuelas., plantas de energía eléctrica y de agua potable, mas 350 fábricas y empresas; 17.000 hectáreas de tierras agrícolas, los puertos y depósitos de alimentos, junto a 16.000 viviendas.
Terminada la ofensiva militar de Israel, el eterno bloqueo militar a la Franja se convirtió en sitio por tierra y mar, no permitiendo la entrada al territorio de alimentos, combustible, materiales para la reconstrucción y ninguna ayuda humanitaria arrojando a 1.700.000 palestinos a la más cruel miseria e indefensión… Más de 100 mil palestinos están pasando el final del invierno “viviendo” en terribles condiciones, en refugios improvisados entre los escombros de las ciudades.
Las organizaciones humanitarias comprometidas con Gaza, han lanzado la alerta internacional para salvar cientos de miles de vidas palestinas por el hambre y las enfermedades, reclaman el cese de le bloqueo.
Pero este pueblo, que ha demostrado a lo largo de toda su historia, su capacidad de reponerse frente a todas las contingencias producto de su lucha por su integridad territorial y cultural, gritan hoy al mundo: “Lo único que consigue su falta de humanidad es aumentar nuestra humanidad. Estamos dispuestos a aceptar el desafío y a luchar por lo que siempre hemos merecido: justicia, libertad e igualdad”.