Cuando de hipocresía se trata, el sistema capitalista monopolista, no se da respiro y si puede se supera diariamente. A estos seres humanos, los llaman aborígenes (desde el origen), pueblos originarios, verdaderos dueños de la tierra, hermanos, etc., pero en realidad dentro de este sistema son marginados, muy marginados. Son seres humanos que tienen muchos derechos, y este gobierno, que hizo de los “derechos humanos” su “bastión”, aplica a rajatabla el principio de, gobernamos para los poderosos: los monopolios.
Y en Neuquén o la Patagonia los poderosos son los petroleros, en Jujuy y Salta son las azucareras o terratenientes, en Santiago del Estero, Chaco o Formosa, son también los terratenientes que manejan hoy la soja. En la zona del Chaco Argentino (Chaco, Formosa, Santiago del Estero, Salta, Norte de Santa Fe), hay 8 millones de hectáreas en disputa, hay más de 150 conflictos. Por un lado, el modelo agropecuario, donde lo único importante es la ganancia, el capital, arrasan, envenenan, matan, con ese único fin; por otro lado las comunidades de pueblos originarios y campesinos, en donde la tierra es su forma de vida. La mayoría de estos conflictos se agudizaron a partir del 2000, en donde este modelo de producción industrial agropecuaria llevó a que se siembren hoy 19 millones de hectáreas de soja. Por eso las 8 millones en disputa, son un bocado importante para los monopolios y su gobierno.
Hace una semana les tocó a los aborígenes de Pampa del Indio pelear para que no los desalojen, terminaron presos varios y fueron liberados por la movilización y lucha de sus comunidades. Hoy les toca a los hermanos de Formosa, de la comunidad La Primavera, a 170 km. de la capital, 850 familias Qom que reclaman las 2.042 hectáreas donde siempre vivieron. Están cercadas por empresarios sojeros y ganaderos.
Luego de soportar el asedio de 4 meses de intento de desalojo, la “justicia” burguesa, el aparato represor de la misma, aplicaron los derechos de los “verdaderos dueños” de la tierra, los monopolios, salieron a desalojar la ruta 86 que estaban cortando, con balas, gases y más balas, los pobladores de la comunidad “La Primavera” resistieron con palos, piedras, puñales y machetes. La orden del juez era desalojar a los que habían invadido el campo. ¿Cómo puede invadir una tierra alguien que nació y vivió toda su vida allí generación tras generación?
Este enfrentamiento termina con la muerte de dos pobladores de la comunidad Qom, un policía, varios heridos y muchos presos (los hermanos Qom). Esta es la política de derechos humanos de este gobierno, que en Formosa la lleva adelante Insfrán, y tiene su correlato en las diferentes provincias. Contra esta política de marginación y explotación, el pueblo y sus comunidades aplican más enfrentamiento y movilización, unidad y enfrentamiento. La acción directa es la solución.