En todos los principales portales y medios de comunicación corrió la noticia que Danone-La Serenísima quiere hacer una revisión de sus negocios en Argentina, principalmente en lo que respecta a la planta de Longchamps.
Como ya nos tienen acostumbrados lloran lágrimas de cocodrilo para sacar en definitiva siempre la mejor tajada de la situación. Ya sea para garronear subsidios del Estado, para evadir impuestos, para evitar conflictos en época de paritarias o como es en este caso, tras las disputas que tienen con el sindicato (que también reclama su tajada) por el aporte de la obra social.
A la empresa Danone le sienta bien el papel de actriz dramática de la telenovela de la ganancia. Pero nada dicen de las fabulosas inversiones que están haciendo dentro de la planta. Nada dicen respecto a que es una de las empresas beneficiadas en épocas de pandemia, donde no paró de producir.
Tampoco nada dicen de la fiesta con la timba financiera que se hicieron durante los últimos cuatro años. Y mucho menos hablan de la sacudida que nos pegaron a los trabajadores con la devaluación de nuestros salarios y los años de paritarias que nos comieron.
Pero lo que en realidad significan sus “lobby” (maniobras propagandísticas donde ponen a sus alcahuetes mercenarios del periodismo) es meter –por un lado- pánico a los trabajadores para que todos nos quedemos calladitos la boca en nuestros justos reclamos; y por otro lado, presionar al gobierno para lograr mejores condiciones financieras para las exportaciones y precios en el mercado interno. Su avaricia y voracidad por la ganancia no tiene límites.
La realidad es que los únicos que perdimos fuimos los trabajadores, que somos los que realmente generamos la riqueza con nuestro trabajo. Donde tuvimos una pérdida de nuestro salario de más del 40%, en un país con mejores condiciones que en cualquier lugar del mundo para la explotación de la industria láctea, con salarios promedio hoy de 400 dólares al mes, cuando en Francia o Alemania un trabajador lácteo con 10 años de antigüedad y una capacitación técnica media para producir está en más de 3.000 dólares. Con tales niveles salariales solo una empresa suicida puede plantearse el riesgo de continuidad. En pocas palabras toda una gran mentira para posicionarse mejor y que nadie abra la boca.
¡Que expliquen dónde están sus supuestas perdidas! cuando sus productos aumentaron más de un 200% en un año. A todo esto, es bueno sumarle que Danone está asociada a Arcor a través de Bagley, y este año adquirieron el 49% del paquete accionario de Mastellone. Pero la cosa no queda ahí, Danone no sólo es socia de Arcor también lo es de Bagó en la empresa Nutricia-Bagó, lo que indica con claridad que en los últimos dos años es uno de los monopolios ganadores en las disputas económicas entre empresas.
Pero los trabajadores de Danone no nos comemos estos engaños que utilizan para extorsionarnos con el salario y otras medidas. Por eso denunciamos este intento mediático de hostigamiento y lamento, lo único que pretenden es crear un clima propicio para dar una vuelta de tuerca a un nuevo ajuste que preparan contra los trabajadores.