Conflicto de la Salud en Mendoza

El calor agobiante y la falta de agua (en Mendoza se declaró la emergencia hídrica hace dos meses), se suman a un clima de alta conflictividad que continúa latente en diversos puntos de la provincia.

A las movilizaciones por estos días, en el marco de la Declaración de Impacto Ambiental sobre la minera San Jorge, se le suma el conflicto de la salud.

A inicios de esta semana, en una asamblea interhospitalaria muy concurrida, los trabajadores de la salud pública decidieron aceptar el 15% de aumento remunerativo y bonificable, que le arrancaron al gobierno provincial después casi dos meses de conflicto.

Ese 15% logrado es para estos meses, a partir de Enero hasta Abril y/o Mayo, que es cuando volverán con las discusiones paritarias. En este marco, lo obtenido puede considerarse como un triunfo, ya que desde el inicio del conflicto la propuesta oficial era que “no se iba discutir recomposición salarial, que no había plata y que hasta Abril o Mayo del 2011 no se hablaba de incremento salarial”.

Al aumento logrado por los profesionales de la salud y por los trabajadores no profesionales del área, se suma el compromiso de “cumplir y hacer cumplir” el convenio colectivo firmado en 2007, que es permanentemente bastardeado por las autoridades sanitarias de la provincia. Y lo que no es menor, “quedó la puerta abierta para las negociaciones de un próximo incremento que se discutirá en el mes de mayo”.

La ejemplar lucha que llevaron a cabo los profesionales y no profesionales, sosteniendo los días de paro con guardias mínimas y con asambleas donde se discutía todo, fue el freno concreto que los trabajadores impusieron a los dirigentes, que en más de un caso, pretendían resolver por la propia.

Las luchas –y las conquistas- por aumentos salariales o un plus antes de fin de año han sido el signo más característico de estas últimas semanas, en donde los trabajadores plantamos bandera y les dejamos claro a los monopolios y sus gobiernos (nacional y provinciales) que ya no estamos dispuestos a seguir siendo postergados.

Todas las acciones independientes de los trabajadores, desde la movilización y la lucha, están sumando a ese torrente nacional que no le da respiro a la burguesía.

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