Decíamos anteayer que la toma por siete días de la casa de gobierno de Tierra del Fuego, fue uno de los hechos recientes más emblemático de la lucha política del pueblo, en donde el Estado debió enfrentarse sin intermediarios y totalmente expuesto, a las demandas de las masas, que lo hicieron retroceder, mostrando su debilidad más absoluta. La carta que transcribimos expresa, desde la experiencia misma, lo que decimos. En esta situación que transitamos, la unidad de los trabajadores y el pueblo está dada por el enfrentamiento, desde cada sector y desde cada lugar, a la política común de explotación y miseria del Estado y sus gobiernos al servicio de los monopolios.
“La lucha de los docentes fueguinos ha escrito una nueva página en la historia del movimiento obrero de Tierra del Fuego. Una página distinta: cargada de tensión, de convicción, de emoción. Una página para el triunfo de la clase trabajadora.
Final de una nueva etapa de la lucha gremial en Tierra del Fuego. Final de una nueva etapa de la lucha de los docentes fueguinos. Las luchas gremiales tienen esos condimentos: se gana, se pierde; se vuelve a ganar, se vuelve a perder; pero siempre con la convicción de que la clase trabajadora tiene entre otras armas la de la lucha en la calle, en este caso y en Río Grande en particular, en las puertas de los Escuelas.
Cuántos docentes habrán participado por primera vez este año de un paro, de un piquete, de una movilización. Cuántos docentes habrán iniciado la lucha del 2013 pensando: “vamos por el mismo camino del 2010”; o, “vamos por el mismo camino del 2007”; cuántos se habrán sumado a la lucha con un sin número de dudas; y si, era lógico.
Cuántos habrán llegado a su casa al final de la jornada y se habrán peleado con sus esposas, esposos, parejas de la vida, de la lucha y de la militancia en algunos casos, con los hijos también; y habrán tenido que soportar los reproches por todo el tiempo que estaban afuera del hogar dedicando el tiempo a la lucha, esa lucha que hoy les da la posibilidad de decir: “esta lucha no fue en vano”.
Docentes peronistas, radicales, mopofistas, socialistas, de derecha, de izquierda; docentes en lucha dejando de lado las ideologías políticas porque la “causa” era “brava”; tan “brava” que al límite de la desgracia se estuvo.
Fue larga esta lucha, quizás más que en otras oportunidades, pero también tuvo una gran carga de tensión; “quiero irme a descansar”, decían algunos; “necesito estar con mi familia” decían otros; “no veo la hora que esto termine”, susurran también.
En Ushuaia concentraciones y movilizaciones, pero en Río Grande fogones en las Escuelas; y la historia del movimiento obrero recordará esto: “en el 2013 la lucha docente se hizo con los compañeros haciendo piquetes durante todo el día en los colegios”.
Y en algunas Escuelas los piquetes se iniciaron tímidamente, y con el transcurrir de las horas se magnificaron, y se preparaban tortas fritas temprano por la mañana, y se preparaban algunos guisos al mediodía, y algunos buscaban a sus hijos y comían ahí: en el piquete que no se podía abandonar.
Y había que aguantar el frío, el viento; y se cantaba y se bailaba para bancar las condiciones climatológicas adversas por estos días. Y otros sectores del trabajo se acercaban y colaboraban con la logística acercando los tachos para el fuego, las maderas, y las gomas para quemar, y otros trabajadores acompañaban con bombos y redoblantes en las movilizaciones.
He visto docentes llorando en estos días, y no por el efecto del viento y el frío, los he visto llorar de bronca, de impotencia, de dolor por la injusticia y por el atropello del Gobierno hacia los trabajadores.
Así se fue gestando este capítulo de la lucha docente de Tierra del Fuego, con los maestros y los profes con la convicción que la lucha debía continuar, a pesar de las críticas que en algunos medios radiales se encargaban de reproducir, sólo con la intención de debilitar la lucha y ser funcionales al Gobierno de turno.
Se cierra un capítulo, se da vuelta la página, pero en definitiva la lucha continúa, es la lucha de siempre, la lucha de la clase trabajadora, HOY, Y EN TIERRA DEL FUEGO HA SIDO LA LUCHA DE LOS DOCENTES, aquellos que educan a nuestros hijos, aquellos que por estos días y como escribió alguien que ya no me acuerdo quien fue, dijo: “hemos dado en estos días clases de lucha”; y es así, seguramente esta acción de los docentes de Tierra del Fuego servirá de ejemplo para otros sectores de trabajadores.
Se educa cuando se tiene la convicción de pelear por una causa justa. Y la causa de los docentes es una causa justa, como la de otras luchas en otros ámbitos laborales. Alguien quiso que esta lucha de los docentes de Tierra del Fuego no se llevara la vida de nadie; pero insisto, se estuvo al límite.
Quiera Dios que los trabajadores de esta provincia no tengan que seguir atravesando situaciones extremas.
No he mencionado a funcionario alguno, ni a organización sindical alguna, porque creo que ÉSTA HA SIDO LA LUCHA DE LOS TRABAJADORES DE LA EDUCACIÓN DE TIERRA DEL FUEGO, con aciertos y con errores, pero en definitiva la lucha de los docentes fueguinos, esa lucha que trascendió los límites de la provincia, esa lucha que en el 2013 les deparó una batalla ganada.
Mis saludos y mis respetos a todos los docentes de Tierra del Fuego. Han ganado una batalla, dura, difícil, pero seguramente esta batalla los ha curtido para otras que seguramente deberán afrontar con el tiempo; porque la vida del trabajador es así: luchar siempre para lograr dignas condiciones de trabajo.”