En reiteradas notas de nuestra página, venimos haciendo hincapié en la profunda crisis política en que se encuentra la burguesía. La inminente elección presidencial es un claro ejemplo de ello, donde no sólo no pueden generar ningún tipo de expectativas reales en la población, sino que el papel impresentable que representan cada uno de los candidatos propuestos, (tanto en el oficialismo como en la «oposición») por el contrario, sólo aumenta el nivel de repulsión y descreimiento hacia las instituciones del Estado.
Tal es así, que un claro ejemplo de esto, se dio luego del anuncio oficial de la fórmula presidencial propuesta por el FPV, con Scioli-Zanini, generando todo tipo de controversias y contradicciones, inclusive en el seno de su propio aparato. Donde luego de un largo tiempo de especulación e indecisión por parte del oficialismo, eligiendo quienes deberían ser los mejores candidatos que puedan defender los intereses de la oligarquía financiera en el próximo periodo presidencial, hicieron pública la decisión en estos días.
Es importante aclarar, que hacemos referencia sólo al partido oficialista, pero que este tema compete a todos los partidos electoralistas de derecha y de izquierda, por igual; donde todos corren la misma suerte de cuestionamiento y degradación política.
Simplemente tomamos como ejemplo el de los candidatos del FPV, para graficar un retrato más de la profunda crisis política de la burguesía, sacudida por los golpes recibidos por la lucha de clases y el grado de conciencia política que ello conlleva, poniendo a la clase obrera y al pueblo en un permanente cuestionamiento y hostigamiento a las decisiones políticas de su enemigo de clases.
Es por eso que la intensión de este artículo es destacar una vez más que todo tipo de plan político propuesto por la burguesía, surge abrochado con un profundo cuestionamiento y un alto nivel de desconfianza, donde queda más que claro que MUERE ANTES DE NACER.
Decíamos anteriormente que la formula política del oficialismo es un retrato de la profunda crisis política de la burguesía, y el circo que representa; si hasta hace poco tiempo atrás, Scioli, fue acusado dentro de las mismas filas del Kirchnerismo como un enemigo al «modelo nac y pop». Un año atrás, exactamente el día 22 de julio del 2014 (según se puede ver en el archivo subido a Youtube), el programa ultra oficialista 678, titulaba su programa con el nombre de «Los fondos buitre ya eligieron sus candidatos presidenciales: Scioli, Macri y Massa», haciendo referencia a los anuncios que habían hecho en su página web el grupo de especuladores denominados buitres, American Task Force Argentina. Luego del anuncio de Cristina Kirchner de la formula presidencial, el mismo programa sale a defender y a felicitar la decisión.
En esa misma línea, también un tiempo atrás, descargaba su furia la referente Kirchnerista Hebe de Bonafini, contra el gobernador de la provincia de Buenos Aires, afirmando que: «Scioli es un tipo que en la época de la dictadura apoyó la dictadura. Si vos sos un tipo de una clase social que te la pasás andando en una lancha y te cagás en lo que pasa en tu país ya te das cuenta que estás del otro lado»…
Así mismo, también está en los registros y archivos, la declaración de Daniel Scioli en una entrevista que en el año 90 le hizo la revista Playboy, donde afirmaba que había tenido un hermano secuestrado por los «terroristas» y que en la década del 70 vivió con mucha angustia al ver que se mataban entre terroristas y militares sin ningún sentido; y en el medio de eso, los empresarios secuestrados, como su hermano, que eran las víctimas… Concluía el reportaje justificando las desapariciones, adjudicando a que sin la actuación de las fuerzas armadas, no se sabía en qué podía terminar el país (entrevista de revista Playboy en abril de 1990).
Así está formado el flamante candidato de los supuestos «paladines de los derechos humanos». La pregunta es: ¿con que se mastica semejante pornografía política?