Como lo venimos planteando en nuestra propaganda, la lucha de clases no le da respiro a la burguesía. EL día lunes pasado, en La Matanza, Pcia. de Bs.As., se movilizaron vecinos y organizaciones hacía las empresas de servicio, la Municipalidad y el Concejo Deliberante, para luego terminar con un acto en la plaza de San Justo.
Esta realidad la estamos viviendo en todo el país y es así. Pero lo que no se vio masivamente pero sí existió, fue el esfuerzo, la dedicación, la voluntad, la organización y los distintos grados de unidad y coordinación que se llevaron adelante.
Fueron asambleas en distintas zonas de La Matanza, actividades públicas como radios abiertas, juntadas de firmas, marchas, ruidazos, cortes, asambleas donde se podían contar con los dedos de las manos la presencia de vecinos… Pero se insistió, se evaluó, se planificó convencidos que el camino para hacer retroceder a la burguesía y sus planes, es con unidad consciente del pueblo y sus organizaciones de base y políticas.
Poco a poco y paso a paso algo está madurando políticamente. Es que por un lado, con una movilización, seguramente no iba a alcanzar para hacer retroceder los tarifazos, que lo importante era generar el hecho político, salir a las calles masivamente, clavar estacas de organización y más unidad, por supuesto.
Por otro lado es que dichas organizaciones deben sostenerse en el tiempo, establecerse, crecer política e ideológicamente y hacerse fuertes desde su propio poder.
A todo esto hay que sumarle que la comunidad educativa se sigue movilizando por los arreglos edilicios en las escuelas, donde los estudiantes están jugando un papel protagónico indispensable, obreros movilizados contra los cierres de fábrica, etc.
Es decir, en La Matanza como en todo el país, las masas no paran de movilizarse. Se deberá transitar un camino de unidad mucho más amplia, mientras en las calles se van clavando estacas de organización política, ejerciendo la democracia directa.