Las inundaciones acaecidas a principio de enero en el litoral argentino tuvieron en la región una dimensión sin precedentes, donde se vieron afectados cientos de miles de personas que lo perdieron todo. Fundamentalmente en los lugares de mayor concentración, como en la ciudad de Resistencia y Corrientes, donde las dos poblaciones suman casi un millón de personas. Cerca de 400.000 personas perdieron casi la totalidad de sus pertenencias, con el dato para nada novedoso, que los sectores afectados, son las barriadas populares, barrios obreros y sectores más vulnerables. Lo mismo sucedió en poblaciones «pegadas» a Resistencia, como Fontana y Barranqueras, todas zonas de trabajadores y personas de extrema pobreza, así como en poblaciones del interior con la misma característica.
Es decir, una verdadera catástrofe, que se suma a la ya dura vida de explotación, hambre y miseria a que vienen siendo sometidos, al igual que todo el pueblo argentino.
Cuánto dolor y hasta cuánta impotencia, pero de ninguna manera resignación. Porque los trabajadores están haciendo la pata ancha, pues ante la desidia de los poderes centrales han decidido tomar la cuestión en sus manos, movilizándose con enérgicas protestas para que las autoridades no miren para otro lado, sea para organizarse en un claro acto de supervivencia recurriendo a la conducta de auto auxiliarse, sea para recurrir a la generosa solidaridad de todo el pueblo argentino, por carriles no institucionales, lazos de clase que caminan por fuera del Estado de los monopolios.
El mismo que sólo tiene soluciones para sus ganancias y lo demás no les importa nada, o en todo caso, si hicieron algo fue precisamente en el intento que no se les prenda fuego la lucha de los pueblos… Al tiempo que tratan de darle un maquillaje, pretendiendo mantener su andamiaje electoral. Es decir, una muestra más de corrupción que reafirma y confirma la esencia de esta sociedad capitalista. No podía ser de otra manera.
Ni hablar del papel de los medios nacionales de desinformación, llámese canales de TV, radiales o escrito, donde muy lejos están de resaltar las noticias de tales calamidades. Es decir, también reafirma y confirma una conducta del nivel corrupto del sistema capitalista.
Pero nuestra clase obrera no se anda por las ramas y tomando las mejores tradiciones históricas, echando manos a la obra estando afectados o no, se pone al frente de su pueblo y sale a buscar soluciones tratando de exigir y resolver. Una muestra de ello son los trabajadores de las empresas SAMEEP y los EMPLEADOS ESTATALES de la provincia del Chaco, que nos hacen llegar un comunicado que pinta de cuerpo entero la conducta de los trabajadores, despojados de toda actividad burocrática, haciendo un llamado a todos los trabajadores argentinos.
Lo transcribimos textualmente.
» Al Sindicalismo Revolucionario y a todos los trabajadores de la Nación:
Los trabajadores pertenecientes al Sindicato de Obreros de SAMEEP de Resistencia Chaco, con sede gremial situada en Pasaje Suiza 553; y los trabajadores pertenecientes al Sindicato de Trabajadores del Estado Provincial de Resistencia Chaco, con sede gremial situada en Villa Elba Lote 216, queremos comunicar a los compañeros del Movimiento Sindical Revolucionario, que en nuestra provincia en general y la capital en particular, la situación es gravísima para la población, producto de las inundaciones, sobre todo en los barrios obreros y más empobrecidos, donde incluso la mayoría de los trabajadores compañeros nos hemos visto afectados de manera dramática al igual que nuestras familias, donde en pocas palabras miles de seres humanos lo han perdido todo.
Pero bien es sabido y no es ninguna novedad que vivimos en un sistema decadente y putrefacto el cual permite que este tipo de catástrofes naturales no tenga ningún tipo de previsibilidad ante lo previsible y peor aún que suceden precisamente por la avaricia de unos pocos que en el afán de la ganancia les importa nada lograr un equilibrio armónico entre la naturaleza y el hombre. Ni hablar del descuido ante los hechos consumados como en este caso de los que se proclaman gobernantes, dejando abandonado a un pueblo que el único recurso que nos queda es organizarnos para tratar de salir de esta situación, echando mano a los esfuerzos del pueblo solidario, lógicamente sin la posibilidad de acceder a todos los recursos que posee el estado en manos de los poderosos, donde en última instancia tenemos la protesta, lucha y movilización para exigirles que resuelvan.
Por estas razones y no otras recurrimos al brazo solidario del Movimiento Obrero Revolucionario PARA PEDIRLES LA SOLIDARIDAD DE CLASE ante estos momentos difíciles, donde pensamos que el agua va a bajar, pero dejando un estrago de hambre y miseria, donde solo los trabajadores conscientes se acordaran de esta situación, momento en que más van a necesitar los afectados más vulnerables.
Saludamos a todos los trabajadores y el pueblo, siendo conscientes que a pesar de la grave
situación económica que padece la clase obrera y el pueblo argentino sabrán comprender lo
urgente y necesario de esta situación y el motivo de nuestro llamado, a este incipiente movimiento, pero a su vez lo más importante que está creando la lucha en Argentina.
SOS (Sindicato de los Obreros de SAMEEP): las donaciones serán recibidas en el domicilio de la sede, Pasaje Suiza 553 (Resistencia, Chaco).
SITEP (Sindicato de Trabajadores del Estado Provincial de Resistencia): las donaciones serán recibidas en el domicilio de la sede, Villa Elba Lote 216 (Resistencia, Chaco).»
Nuestro Partido se suma al llamado a la solidaridad de los trabajadores del Chaco, al tiempo que exhortamos a todas las organizaciones de trabajadores, sociales y políticas a poner manos a la obra ante esta dramática situación, lamentablemente silenciada.