En el día de hoy y en conferencia de prensa, al gobernador de Mendoza, Rodolfo Suárez, no le quedó otra que anunciar la suspensión de la reglamentación de la nueva ley de Minería que recientemente había sido modificada por la Legislatura local, habilitando el uso de cianuro y otras sustancias contaminantes en las extracciones. (ver nota en esta misma página del día 24 de diciembre, https://prtarg.com.ar/2019/12/24/mendoza-50-000-voluntades-reclamando-restitucion-plena-de-la-ley-7722/).
Justificando tal decisión, en donde queda claro que lo único que hace retroceder a las políticas de los monopolios en el gobierno es la decidida y masiva lucha del pueblo, agregó: “El primer deber que tiene un gobernador es garantizar la paz social del pueblo. Han habido hechos de violencia, hay cortes de ruta, hay una queja de ciertos sectores, algunos muy violentos, queremos evitar que esto pase a mayores”.
Párrafo aparte merece la bochornosa actuación de “la oposición” a Suarez, que con la gente en la calle repudiando abiertamente esta ley, se dieron vuelta como una media, aunque todo el mundo sabe que habían puesto los votos en la sesión de la Legislatura, presionados por el gobierno nacional y los compromisos adquiridos con la Cámara Minera.
Reculando en chancletas diría alguna de nuestras abuelas… y más allá que se especule que de alguna manera están tratando de calmar los ánimos, llegar a un fin de año sin conflictos en la calle y transitar la próxima fiesta de la Vendimia “medianamente en paz”, lo ocurrido hoy es una clara victoria del pueblo mendocino en las calles, que no está dispuesto que un puñado de mineras y empresas dilapiden el agua de la provincia en pos de sus propias ganancias.
Los ánimos venían bastante caldeados, el rebote de esta lucha trasciende nuestras fronteras a punto tal que en la red social Twitter el hashtag “Mendoza” fue tendencia mundial estos días. Por otro lado, a la voz de artistas internacionales y hasta la iglesia local, el reclamo sumó el respaldo de la Comisión de Reinas Nacionales de la Vendimia amenazó con un boicot a la fiesta tradicional más importante de la provincia. Esta agrupación de mujeres apuntó contra el gobierno advirtiendo que: “Creemos necesario y urgente solicitar no se realice ningún acto previsto para la Vendimia 2020, hasta que se dé marcha atrás con esta reforma que pone en peligro nuestro recurso más preciado que es el agua», señalaron las mendocinas. “Si no es así, entendemos no hay nada que festejar y por ende SIN AGUA NO HAY VENDIMIA”.
Más allá de cómo presente el tema la burguesía, el agua no es un problema solamente de Mendoza. Este recurso -que nace en Mendoza- es estratégico, es nacional y se transforma en un problema político nacional para toda la burguesía.
El gobierno ya está maniobrando para que este paso atrás que se vieron obligados a dar no sea definitivo. Por eso debemos continuar en estado de vigilia. Por eso, más allá de este anuncio del gobierno, hoy jueves se esperan nuevas marchas, movilizaciones y cortes que llevará adelante el pueblo mendocino exigiendo que la normativa se derogue o anule, y por qué no, también a modo de festejo popular. Dimos un paso, les frenamos la mano, y esa batalla ganada es toda del pueblo movilizado.
Como señala uno de los comunicados: «Nuestro pueblo ha comprendido el peligro que significa tener la actividad megaminera aguas arriba en toda nuestra cordillera. Esta es la razón de fondo de la masividad del reclamo actual. Hay una crisis de representación porque no tienen licencia social”, “Anoche en la cena de Nochebuena no hubo grieta, todos juntos brindamos por el agua”.
Lo único que los hace retroceder es la lucha. ¡¡Arriba el pueblo de Mendoza!!