Hace 10 días en la planta de Acindar de Villa Constitución se produjo un hecho gravísimo.
En el momento que se realizaba una asamblea en Trefilación de Alambre por reclamos propios del sector, el gerente de la planta (Gabriel Sissia) increpó y amenazó al compañero Julián Arizaga (incluso con amenaza de despido). Esto produjo que este compañero se descompense y sea internado por un problema coronario grave, estando en terapia 3 días. Le tuvieron que colocar tres sténts para salvarle la vida.
Lejos de ser un caso aislado (tal como denunciaron los trabajadores de la planta) la situación de aprietes y amenazas se han transformado en moneda corriente, lo cual ha llevado a situaciones previas de igual gravedad o trágicas.
En la nota publicada en esta página (https://prtarg.com.ar/2021/06/12/acindar- otro-asesinato-laboral/) denunciamos la muerte de Brian Albornoz, producto que la empresa quiso acelerar el proceso de comienzo de producción a la hora del arranque de planta, a la vuelta de un feriado largo.
A esto se suma el fallecimiento del compañero C. Bazan, que se descompensó cuando entraba a la planta, y también tuvo una falla coronaria. Este trabajador se desempeñaba en Usinas, un sector que venía con medidas de fuerza desde hacía varios meses por un achique que se produjo sacando contratados, exigiendo mediante aprietes de los gerentes que los huecos se cubrieran en horas extras. Tensión diaria que hicieron mella en el físico del compañero. Otro caso fue el de Damián, gruero del Tren 1, que luego de una discusión con un gerente (que le exigía cubrir en extras una faltante) se descompensó y paso 2 días internado.
Pero volviendo al último suceso, los compañeros de Trefilación automáticamente hicieron un paro de 24 horas exigiendo que saquen al gerente del sector. Paro que el gremio levantó con la promesa de una reunión que le hizo la empresa para ver el caso y la presentación de una nota en la secretaria de trabajo. Todo esto como única respuesta a los compañeros. Por supuesto que esto (para el gremio) muere ahí.
Claro que en el medio mostraron bien la mierda que los rodea, ya que salieron a chicanearse por lo sucedido (entre las diferentes listas) mientras el compañero peleaba por su vida. De fondo están las elecciones a Comisión Directiva, único objetivo de estos miserables, y de paso desvían el ojo de los compañeros de la Empresa, real responsable de la situación.
Obvio, cumplen su función dentro del Esquema Empresarial que, junto al triunvirato que se completa con Secretaría de Trabajo local, lo único que quieren es tapar, ocultar y negar esta situación de aprietes y amenazas en la planta que, como toda multinacional, sólo les importa la producción.
Pero la unidad y disposición de los compañeros no se hizo esperar. Rápidamente se denunció todo esto, llegando solidaridad primero de los sectores de la planta, luego, de los trabajadores de la ciudad y de todo el país, difundiendo lo que ellos claramente quieren tapar (incluyendo por supuesto los medios locales, otros que maman de la teta empresarial) y denunciando a ACINDAR como principal responsable.
Entendiendo que solo con la UNIDAD DE CLASE podemos enfrentar y parar esta sangría que intentan hacer la clase burguesa con los trabajadores.
Los trabajadores de Acindar venimos de arrancarles un bono de $30.000 (que igualmente no conformó a todos) pero se hizo con asambleas y paros. Con mucha más razón no vamos a dejar que esto quede así.
Como queda demostrado en todos los casos que detallamos, los aprietes vienen en medio de medidas de fuerza, por su desesperación por producir, por su hambre de ganancias que chocan con la decisión de los compañeros de no dejarles pasar nada, de no permitir que estos niveles de explotación sigan así. Hartos de horas extras, exigiendo que tomen más operarios, enfrentando los achiques de personal y frenando los ritmos de producción.
Sabemos que hoy le tocó a Julián, mañana puede ser cualquiera de nosotros.
Por eso no vamos a permitir que esto quede en la nada.