El lunes 13 de junio pasado a primera hora se reunieron los trabajadores pesqueros y decidieron que por la noche las plantas pesqueras de Chubut quedaran paralizadas. El reclamo es por una recomposición salarial.
Esto ocurre cuando se transitan las primeras jornadas de apertura de la temporada de langostino en aguas nacionales.
En paralelo a este bloqueo, en el parque pesquero de Puerto Madryn se identificaron camiones contratados por el sector empresario que pretendían trasladar materia prima de la pesca fuera de la provincia (langostino a Mar del Plata, por ejemplo).
Esto perjudica no sólo a los trabajadores del sector, sino a los intereses de la provincia, con un reciente cambio de legislación que permite retirar materia prima fuera de su jurisdicción. Cosa que tienen claro los trabajadores tanto como la complicidad de los dirigentes sindicales con el sector empresario monopolista de las Cámaras de empresarios pesqueros.
Con estas medidas de fuerza no convocadas por el sindicato sino desde las bases obreras, presionaron al gremio de la alimentación para que se convocara a una reunión en el día de hoy miércoles 15. (Vale aclarar que no hay un sindicato especifico de la industria pesqueras en Chubut).
La última propuesta de mejora que elevó la Cámara Argentina Patagónica de Industrias Pesqueras fue rechazada por el cuerpo de delegados que decidieron comenzar con medidas de acción directa.
Los delegados de las plantas expresaron que “la propuesta fue inferior a la anterior. En el cuerpo de delegados decidimos avanzar con las medidas, y además sabemos con firmeza que había camiones que se estaban llevando mercadería fuera de la provincia”. Un grupo de delegados se trasladó hacia Arroyo Verde y detuvo camiones con destino a Mar del Plata.
Este inicio del conflicto llevado a cabo por los trabajadores, generó “molestias” en un empresariado que esperaba una actitud diferente ante el acuerdo de “paz social” con el Sindicato, tal como lo expresó Ventura Lafuente Matos, presidente de la Cámara.
En el mediodía de ayer martes, los camiones retenidos por los trabajadores en Arroyo Verde fueron liberados y los apoderados legales de la Cámara amenazan con una presentación judicial por la retención.
En definitiva, está claro que los grupos económicos de la péscalo que tienen a mano para frenar estos justos reclamos es judicializar a los trabajadores cuando éstos se plantan con firmeza a defender sus derechos y a luchar de forma independiente, rompiendo el corsé de cualquier burocracia sindical.