Sobre la necesidad de aumento de la masa de plusvalía y la tendencia decreciente de la tasa de ganancia

La nota de ayer publicada en esta misma página planteaba la necesidad de la oligarquía financiera de la disminución de la masa salarial a fin de sostener y/o incrementar los porcentajes de ganancia.

Desde otro ángulo, diríamos lo mismo afirmando que lo que intenta la clase dominante es incrementar la masa de plusvalía a fin de atenuar la tendencia decreciente de la cuota de ganancia porque, partiendo de una magnitud dada del valor capital, la cuota de ganancia no puede nunca aumentar o disminuir sin que aumente o disminuya, al mismo tiempo, la masa de plusvalía.

Abundando sobre el tema, diremos también que existen diversas causas que actúan sobre esta ley del capitalismo descubierta por Carlos Marx y que hacen que este juego de influencias que contrarrestan y neutralizan los efectos de esta ley general, le den simplemente el carácter de una tendencia, tal como la definió el mismo Marx.

No obstante, adentrándose en el estudio y análisis de estas mismas causas, Marx pudo demostrar que las mismas no eran más que paliativos temporales y que, a la larga, contribuían todas a incrementar la tendencia decreciente de la cuota de ganancia, razón por la cual la burguesía queda inerme para la aplicación conscientes de mecanismos que contrarrestaran en forma definitiva los efectos de esta ley general.

Antes de desarrollar el tema, para una mayor comprensión, recordamos la fórmula de la tasa de ganancia: Tasa de ganancia (% G) = Plusvalía (P) dividido el Capital total invertido (CT que es la suma del Capital Constante (máquinas, materias primas, fábricas, energía y otros) más el Capital Variable (salarios). La fórmula: % G =   P/CT

Veamos algunos ejemplos:

* Aumento del grado de explotación del trabajo:

Aumentando la jornada laboral o mediante la intensificación del trabajo mismo (aumento de los ritmos de producción, mejora de la organización para la producción fabril y otros) se obtiene una masa mayor de plusvalía. De esta manera, en la fórmula de la tasa de ganancia se aumenta el numerador y se mantiene el denominador aumentándose el resultado del porcentaje final. No obstante, los procedimientos encaminados a producir plusvalía relativa tienden todos ellos a convertir en plusvalía la mayor cantidad posible de una masa determinada de trabajo y también a emplear la menor cantidad de trabajo posible en proporción al capital invertido (se extrae menos plusvalía). En conclusión, vuelve a disminuir el numerador de la fórmula de la tasa de ganancia en relación con el denominador de la misma. ¡La cuota de ganancia no disminuye porque el trabajo se haga más improductivo, sino porque se hace más productivo!

* Reducción del salario por debajo de su valor (se entiende como tal un valor inferior al valor del conjunto de bienes de todo tipo que son necesarios para mantener y reproducir la fuerza de trabajo).

Ésta es la causa más importante que contribuye a contrarrestar la tendencia decreciente de la cuota de ganancia. Sin embargo, por las razones expuestas en la nota de ayer, esto es de imposible sostenimiento para la burguesía en nuestro país. El impuesto a las ganancias sobre los salarios, se inscribe en esta voluntad de disminuir la masa salarial.

* Abaratamiento de los elementos que forman el capital constante.

Con los avances de la producción capitalista y el aumento de la tecnología y de la ciencia se obtienen mayores volúmenes de elementos materiales a procesar con menores costos, lo cual incide en la disminución del denominador de la fórmula. No obstante, esto ocurre en forma temporal ya que los mayores volúmenes no implican menores valores en el producto final. Lo que se obtiene a la larga es un abaratamiento del producto y la fórmula vuelve a regir con su denominador crecido respecto de su numerador.

* La superpoblación relativa.

El objetivo de transformar en plusvalía mayor cantidad de trabajo por cada obrero, hace que el capitalista tienda a disminuir la cantidad de trabajadores para producir la misma cantidad de mercancías. No obstante, la existencia de mayor desocupación disminuye fuerza a la baja los salarios generales y, si bien disminuye la cantidad de capital variable disminuye también la masa de plusvalía. Aquí también la misma causa que contrarresta la tendencia de la disminución de la tasa de ganancia, actúa en forma contraria.

* El comercio exterior.

Mediante el comercio exterior pueden abaratarse los elementos del capital constante con lo cual se contrarresta la disminución de la cuota de ganancia, a la vez que pueden venderse a mejor precio los productos en el mercado extranjero, obteniéndose así una mayor cuota de ganancia. Pero esta situación hace que se estimule la producción y la acumulación y centralización del capital, aumentándose así el capital constante en forma progresiva volviendo a incrementarse el denominador respecto del numerador de la fórmula de la tasa de ganancia.

Estos y otros ejemplos tratados por Marx, nos demuestran la imposibilidad de revertir en forma conscientes esta tendencia irreversible de la producción capitalista. Si a estos mecanismos estrictamente económicos le agregamos (tal como lo dijimos en la nota de ayer) los elementos políticos y sociales generados por la confrontación entre las clases, vemos cuán claramente encerrado y sin posibilidad de transitar por otro destino está el modo de producción capitalista el cual no tiene alternativa de prolongarse indefinidamente ya que sus propias contradicciones insalvables y antagónicas lo conducen a su final.

Pero tal como ocurre con la ley de la tendencia decreciente de la cuota de ganancia, esta otra ley histórica de la división en clases de las sociedades está sujeta a factores que la retrasan o la aceleran, entre los cuales destaca el crecimiento, desarrollo, organización y disposición a las acciones revolucionarias de las masas unidas de la clase obrera y los sectores populares para hacer posible la destrucción del capitalismo y la construcción de la sociedad socialista.

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