Tres posturas políticas y una misma posición de clase

 1) Alberto Fernandez: “evitemos estar en las calles”

2) Moyano: flexibilizar Convenios para destrabar el pacto social de Alberto Fernández y la UIA.

3) Macri: ¿?…

 En una nueva semana agitada, el candidato Fernández comenzó a rodar el viejo y remanido discurso de echarle la culpa al gobierno anterior, advirtiendo “lo difícil” que será el futuro inmediato. La esencia de estas exposiciones se encuentran en las declaraciones anteriores.

Lo más concentrado del capital financiero, entendiendo esto como oligarquía financiera, exige la “paz de los cementerios” para garantizar la gobernabilidad de la clase dominante, y con ello, profundizar fundamentalmente en la reforma laboral que garantice mayor explotación y opresión para nuestro pueblo.

El “evitemos estar en las calles” es una amenaza velada a todo intento de nuestro pueblo de abrir las compuertas del reclamo bajo un hipotético “gobierno nacional y popular”. Hablamos de reclamos económicos y políticos que se van amasando durante décadas en la conciencia política de nuestro pueblo. Son muchas las voces “progresistas” que comienzan a abrir el paraguas y advierten que lo que no se le hizo a Macri no se lo debe hacer a Fernandez-Fernandez. ¡De la casa al trabajo y del trabajo a la casa, reclaman!

Tampoco sorprende la declaración de Moyano. La misma se da de la mano con la idea de la burguesía de desclasar el concepto de Estado. Pacto social es avanzar en la institucionalización de la reforma laboral. Flexibilizar convenios va en esa dirección. Un Estado que le pertenece a los monopolios y a los mercenarios que responden positivamente a esa idea.

Gobierno y “oposición” parlamentaria seguirán trabajando por la gobernabilidad del ajuste, y en ello, pondrán todas sus energías. Es el viejo cuento de “la zanahoria o el garrote”… Cuando el engaño no funciona, aparecen los palos…

Pero esa andrajosa politiquería burguesa (estructuralmente en crisis política, reafirmada en las dos “promisorias frases” planteadas al inicio), nos permite afinar la táctica del proletariado.

Que se vaya Macri es condicionar al gobierno que viene.

El que se vaya Macri tiene un sentido estricto de la palabra y otro más amplio. El “así no se puede seguir un día más” responde al lenguaje directo. La presión social y económica a la que estamos sometidos es insoportable, necesitamos respuestas ¡ya! Ganar la calle, mal que le pese al “señor” Fernández, es el camino. Y de algún modo le agradecemos que nos “ilumine” sobre cuál es su preocupación.

En el sentido amplio, condicionar es mantener en forma permanente la lucha por los derechos políticos-económicos- sociales de la gran mayoría del pueblo, para atacar la ambiciosa “pacificación” a la cual nos quieren llevar con sus pactos sociales.

Pero en ese ir y venir de ganar las calles, la expresión es mucho más amplia y no subestima un sinfín de iniciativas que golpean los planes del Estado Monopolista y de quiénes pelean por su administración.

Es en ese camino de “garronearlos” por todos lados, de crearles uno y mil conflictos (que se diputan derechos perdidos o por conquistar) es en donde deberemos mantener firme el timón de ir construyendo y materializando el embrionario proyecto revolucionario. Nada de “apaciguar” aguas.

El ir amasando este proyecto significa que, desde una movilización entendida desde el concepto más amplio de la palabra, hay que atar los cabos para golpear cada vez más con los puños cerrados.

Para ello hay que confiar en nuestro pueblo, en nuestra clase obrera y por ello mismo persistir una y otra vez en plasmar las fuerzas políticas revolucionarias en todos los planos de la lucha de las clases.

Ese torrente abierto, de broncas, de dolor, se tiene que encaminar hacia la revolución. Y para ello hay que seguir en el camino de la acumulación de fuerzas que resulten de una resistencia a todo lo que el Estado de los monopolios proponga.

Al señor Fernández y al señor Moyano le damos un “gracias muy grande” pero créannos que con la puertita abierta en las PASO para que se vaya el “señorito” Macri, haremos todo lo posible y también “lo imposible” para que a ustedes les llegue el mensaje con el mismo rigor.

La lucha por los derechos políticos, económicos y sociales no se detendrá y seguirá exacerbando la lucha de clases.

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