“A partir de hoy 1 de junio vamos a producir 10 minutos más por turno. Que se tomarán de tiempo de comedor. De la siguiente manera paramos a la mañana 10:45 hasta 11:20. A la tarde paramos 19:30 a 20:05. Este es un punto que se negoció con la empresa para asegurar el futuro de la planta. Nos informa la empresa que el segundo semestre de este año tenemos un aumento en la producción. Este esfuerzo que se va a realizar en principio por cuatro meses se verá recompensado en el bono vacacional de las próximas vacaciones. Ej: de 230 hs. a 250 hs. Y si la empresa hace uso de un mes más como noviembre o diciembre se incrementará con más horas en el bono vacacional.”
Este párrafo que publicamos lo hicieron circular desde el sindicato SMATA en la planta de Ford en Pacheco, provincia de Buenos Aires.
Seguramente todos y todas, quienes leen esta nota estarán pensando que vino desde la dirección de la empresa o de RRHH de Ford, pero no.
Ese es un mensaje que envió el sindicato a sus afiliados. Es así: el sindicato más preocupado por los planes de la empresa que por los derechos de las y los trabajadores.
Desmenucémoslo: “un punto que se negoció con la empresa para asegurar el futuro de la planta.” Lo que no dicen es que la planta tiene el futuro asegurado, ya que en abril Ford Argentina puso en marcha la primera parte del plan de inversiones de u$s 580 millones. Y lo más aberrante es que “negocian” entregando. ¿No saben estos señores sindicalistas que cada derecho de la clase trabajadora se conquistó con lucha?
Entre los planes de la empresa puede verse que en abril de este año se puso en marcha la primera etapa del plan de inversión de u$s580 millones para producir en Argentina la próxima generación de Ranger en 2023. El proyecto, anunciado en diciembre de 2020, incluye una importante modernización de Planta Pacheco y una significativa inversión en el desarrollo de autopartes locales, para lo cual se destinará alrededor del 30% de la inversión.
La planta de Pacheco detuvo la fabricación de Ranger durante cinco semanas en marzo y abril, ya que necesitan realizar cambios estructurales.
En ese lapso, en el sector de Estampado se realizaron trabajos de infraestructura para la futura instalación de una nueva línea de prensas de alta velocidad; esto incluyó trabajos de movimientos de suelo y cimientos, y la elevación de los techos existentes.
En el sector de Carrocería, se incorporaron nuevas celdas automáticas con tecnología de última generación y se están comenzando a instalar 338 robots de soldadura y manipuleo, proceso que se completará a mediados de 2022.
La planta de Montaje también presenta modificaciones en esta primera etapa: se instaló una línea completamente nueva para el proceso de vestido de motores y se realizaron los trabajos requeridos con el fin de instalar la futura línea de chasis, para permitir una mayor flexibilidad para la fabricación de la nueva plataforma de Ranger.
Como vemos, la empresa tiene planes muy ambiciosos basados en la explotación de las y los trabajadores. No olvidemos lo que disminuyeron nuestro salario a precio dólar.
En definitiva, el negoción que para ellos es producir con salarios devaluados.
Desde nuestra clase, debemos planificar la resistencia activa frente a sus deseos de más ganancias. Desde las líneas de producción, desde cada puesto de laburo debemos llevar la discusión a los compañeros y compañeras de cómo llevar a cabo acciones que prioricen los derechos de nuestra clase e ir organizando nuestras propias fuerzas. Es más que obvio que el sindicato es un apéndice de la empresa.